PSOE y PSC avisan a ERC de que no podrá seguir en el tripartito sin apoyar el Estatuto

¿Cómo es posible que ERC continúe en el Gobierno de Cataluña si considera "un fracaso" la principal obra del Ejecutivo catalán: un nuevo Estatuto? Esta "reflexión" en forma de pregunta la formuló ayer el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, para concluir que si los republicanos mantienen esa tesis es difícil que puedan seguir en el Gobierno catalán. La dirección del PSOE mantiene esta línea, pero asegura que no pretende romper el Ejecutivo de Cataluña, sino que ERC se atenga a las consecuencias de su actitud. En la misma línea, el portavoz del PSC, Miquel Iceta, advirtió a ERC de que es "difícilmente conciliable" que el Gobierno catalán fomente a la vez la participación y la abstención en el referéndum del Estatuto.

Los avisos de los socialistas a ERC no cesan desde hace días para que tome conciencia de que su concurso no es necesario ni en Madrid ni en Cataluña. Ahora bien, de inmediato se añade que "la huella" de ERC está en el texto aprobado entre el PSOE y CiU por lo que no creen posible que, al final, no lo apoye.

No fue a humo de paja la declaración que ayer hizo el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, sino que la formuló tras la reunión de la comisión permanente de ese partido.

"Si el tripartito ha hecho del proceso de reforma del Estatuto la prioridad de su actuación, no entenderíamos que un partido que forma parte de ese Gobierno pueda considerar seguir en ese Gobierno después de calificar de fracaso el resultado", señaló Blanco. A continuación, vinieron las llamadas "al consenso" de todas las fuerzas políticas, incluido el PP. "Algunos partidos están en los extremos, singularmente el PP, pero quienes sean un obstáculo a las reformas pagarán su actitud en las urnas", auguró el número dos del PSOE.

Ahora bien, aunque el PP y otros partidos se avengan a negociar, el margen para modificar el texto pactado con CiU "es mínimo". El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, se lo explicará hoy al secretario general de ERC, Joan Puigcercós; mañana a IU-ICV, y el jueves al PP.

No sólo el PSOE presiona a ERC. Miquel Iceta, portavoz del PSC, advirtió de que el Gobierno catalán sufriría "un sobresalto importante" que "pondría a prueba su solidez y coherencia" si ERC defendiera una posición distinta a la de sus socios del tripartito en el referéndum del Estatuto.

Hasta ahora, la estabilidad del tripartito ha quedado a salvo de las turbulencias registradas durante la elaboración del Estatuto, pero Iceta admitió ayer que quizá eso no siga siendo posible si no se logra incorporar a ERC al pacto. "Eso es lo bueno, pero lo bueno no siempre es lo que finalmente pasa", reconoció.

Carod pide una cumbre

A todo esto respondió ayer el líder de ERC, Josep Lluís Carod, proponiendo una reunión de los cuatro partidos catalanes que apoyan el Estatuto, convocada por el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, "para ver si podemos seguir avanzando juntos". Carod, que ayer por la tarde se entrevistó con Maragall, recordó que ERC es en estos momentos el único partido catalán que no ha agotado su margen de negociación con el Gobierno del PSOE.

El ponente de ERC en la reforma del Estatuto, Joan Ridao, preparó ayer la lista de 80 puntos del Estatuto que pretende pactar con el PSOE. La mitad de estos puntos se refiere a materias que había madurado durante las últimas negociaciones multipartitas pero no estaban cerradas. La otra mitad son materias en las que ERC considera que hay recorrido para el acuerdo, pese a que las "prisas" de CiU e ICV para pactar con el PSOE han debilitado a la parte catalana.

Carod enumeró ayer unas cuantas de estas materias: las competencias sobre cajas de ahorros, mutuas y colegios profesionales, derecho civil, espacios naturales, régimen local, la participación en instituciones internacionales como la Unesco, y las disposiciones adicionales que preveían, entre otras cosas, el traspaso a la Generalitat de la gestión de grandes infraestructuras como el puerto y el aeropuerto de Barcelona.

Ridao explicó ayer que la actitud de las bases de ERC respecto a la actual situación del proyecto es muy negativa y que sólo podría convertirse en positiva si los negociadores republicanos arrancan mejoras "sustanciales". A estas alturas, dijo, "no veo posibilidades de pacto si el Gobierno no ofrece mejoras también en la financiación, en aspectos como el fondo de suficiencia, la configuración de la Agencia Tributaria y las inversiones en infraestructuras".

Por otra parte, el segundo partido de CiU, Unió Democràtica, acusó ayer al presidente de la federación nacionalista, Artur Mas, de haber maniobrado para excluir a Josep Antoni Duran Lleida de la negociación del día 21 con el presidente Rodríguez Zapatero con el objetivo de atribuirse el éxito en solitario, informa Europa Press.