Protesta de la Embajada de Israel por una obra de teatro

El director general de Promoción Cultural de la Comunidad de Madrid, Javier Casal, se disculpó ayer con el embajador israelí en España, Víctor Harel, "por si se ha sentido ofendido o no justamente tratado" en la obra de teatro Conversación con Primo Levi, que se representa en el Círculo de Bellas Artes.

Casal respondía así al embajador, que reprochó a las "autoridades locales" madrileñas que hayan apoyado la representación de esta obra, enmarcada en los actos de homenaje a las víctimas del Holocausto, en la que, en su opinión, se "deshonra y mancilla" a Israel con fines "claramente antisemitas".

"El embajador tiene toda nuestra simpatía, toda nuestra solidaridad", afirmó Casal, quien explicó que la Administración regional "no tiene en su mano suspender ni retirar" la obra, y subrayó que la Consejería de Cultura tiene también "absoluto respeto hacia los creadores artísticos".

El montaje, protagonizado por Manuel Galiana y dirigido por Mercedes Lezcano, muestra imágenes de las atrocidades en los campos de concentración nazis y también de soldados israelíes torturando a palestinos.