Brújula de bolsillo para inmigrantes

Los inmigrantes recién llegados a Madrid tienen desde ayer a su disposición un pequeño manual que, si saben leer, les orientará gratuitamente en sus primeros andares por la ciudad y la región. El librito, de 10'5 por 15 centímetros de tamaño, cabe en cualquier bolsillo y en sus 99 páginas, más otras para notas personales, se inserta información elemental para que el recién llegado pueda hallar respuesta a las preguntas básicas que, en tal trance, cada cual suele plantearse.

Direcciones, teléfonos gratuitos desde cualquier fijo, como el 900 21 01 33, de la Oficina Regional para la Inmigración de la Comunidad de Madrid, y enclaves de interés componen el contenido de esta obrita que, en sus catorce apartados, permite atajar cuantas dudas puedan surgir ante la mirada, normalmente desorientada, del que acaba de arribar.

Guía de primeros pasos para inmigrantes, que así se llama el textito, incluye información sobre requisitos de documentación y permisos de trabajo y residencia; da cuenta de las exigencias de empadronamiento; informa sobre la vivienda y relata las prestaciones de la Seguridad Social, además de brindar datos básicos sobre educación, el empleo o la situación de la mujer; da noticias para los jóvenes y las familias, así como sobre transportes, con plano de metro incluido.

El libro ofrece asimismo un listado de 130 embajadas y consulados, y otros tantos ayuntamientos. Su estilo sencillo y descriptivo le otorga evidente utilidad.

La Guía ha sido editada en las lenguas más habladas en la región -español, inglés, francés, árabe, chino y rumano- por la Consejería de Inmigración de la Comunidad de Madrid, que encabeza Lucía Figar de Lacalle, presentadora ayer del libro en el patio central de la Casa Encendida, en la Ronda de Valencia. A la cita comparecieron numerosos dirigentes de asociaciones de inmigrantes en Madrid quienes, de consuno, loaron una iniciativa como ésta, inédita y con pocos precedentes semejantes. La Consejera Figar reconoce que la idea partió de sus predecesores y muestra su contento por haberle correspondido a ella aplicarla.

Rectores de colectivos peruanos, chinos -en España hay seis periódicos en chino- rumanos, ecuatorianos y marfileños, entre otros, aportaron ideas para hacer que el manual satisfaga las demandas de sus nacionales. Alguno de los asistentes señaló la conveniencia de que la guía sea traducida al portugués.

El número de moradores inmigrantes en la Comunidad de Madrid se sitúa en torno al 15% -unos 930.000- del total de la población; pertenecen a más de 150 nacionalidades. Como ejemplo, sólo el colectivo ecuatoriano tiene en Madrid hasta 50 asociaciones federadas, con un número de asociados que va desde los 2.000 para algunas entidades deportivas, hasta los 30 adscritos a entidades culturales o religiosas, según explica Max Íñiguez, que dirige la Federación de Asociaciones Nacionales de Ecuatorianos en España, unos 350.000 en Madrid. "Nuestro principal problema asociativo aquí es la ausencia de líderes, ya que cuando el ecuatoriano llega, muestra un gran anhelo por asociarse, pero recela de que pueda ser manipulado. Precisamos de gestores que sirvan para organizar a los recién llegados", dice Íñiguez. Para Hassan Arabi, presidente de la Asociación por la Solidaridad y la Integración de Inmigrantes, "hoy en Madrid es prioritario dar respuesta a la interculturalidad. Las asociaciones con un troquel nacional cumplen una función primordial", dice, "pero necesitamos que sean complementadas con otras plurinacionales, que reflejen la variedad de culturas que la inmigración presenta", subraya. Arabi, que es marroquí, se ufana de que su asociación brinde clases gratis de árabe a los españoles que deseen aprenderlo, entre otras prestaciones.

La primera edición de la guía, cuya cuidada impresión ha corrido a cargo de la imprenta de la Comunidad de Madrid, cuenta con 50.000 copias que serán distribuidas gratuitamente desde las instituciones regionales. Se contempla su edición en otras lenguas y la progresiva ampliación de sus contenidos.

La elaboración de la guía ha necesitado ocho meses de acopio y evaluación de información, en muchos casos previa consulta mediante cuestionarios entre asociaciones, instituciones e inmigrantes. Presumiblemente, a la difusión de la Guía se sumarán las misiones diplomáticas a través de sus consulados, habida cuenta de la demanda formulada por algunos de los presentes, como Diego Alvarado, decano del Cuerpo consular en Madrid: "Cada día se registran en el Consulado de Perú al menos 50 recién llegados".

Precisamente, quien fuera cónsul de Colombia en España años atrás, Gabriel Fernández, ha sido designado para regir la Dirección General de Inmigración que, con la de Dirección de Cooperación, que encabeza Percival Manglano, forman la Agencia para la Inmigración y Cooperación al Desarrollo, que Lucía Figar preside. En un ambicioso programa de coordinación, la agencia plantea atraer a sus reuniones periódicas a los viceconsejeros de la Comunidad de Madrid.