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El PA participará en el trámite de enmiendas del Estatuto aunque no respalde la proposición de ley

Los andalucistas dicen que quieren hacer ver que rechazarán cualquier estatus inferior

Los andalucistas no volverán a la ponencia de la reforma del Estatuto (a la que le queda sólo una reunión), pero sí participarán con enmiendas al texto en la Comisión de Desarrollo Estatutario cuando se constituya. El secretario general del PA, Julián Álvarez, justificó ayer la salida de su grupo de la ponencia en la "convicción" de que el presidente de la Junta, Manuel Chaves, está haciendo concesiones al tripartito catalán a costa de que Andalucía tenga un estatus inferior. El gesto andalucista persigue hacer ver, dentro y fuera de la comunidad, que el PA no va aceptar diferencias.

El PA se incorporó a la reforma estatutaria con muchas cautelas. Como recordó ayer el propio Álvarez, los andalucistas cuestionaron desde "el primer día" el sistema de trabajo, e inicialmente adoptaron un actitud durmiente hasta presentar un texto alternativo completo, que les ha servido de base para ir cerrando acuerdos, muchos de ellos con reservas. En las conversaciones que ha mantenido con Manuel Chaves, el secretario general del PA también le hizo saber que no estaba de acuerdo con establecer un calendario fijo y que la intención de su partido era no firmar la proposición de ley de la reforma, sin que esto condicione su posible apoyo final al texto.

Si la estrategia del PA de no adquirir compromisos que condicionen sus movimientos futuros viene de lejos, y la conocía el PSOE, su salida abrupta de la ponencia, no. Según explican, la decisión de abandonar el órgano la ha espoleado la actitud de Manuel Chaves respecto a la negociación del Estatuto catalán, pues tienen la "convicción", dijo ayer Álvarez, de que el presidente andaluz está utilizando a Andalucía como "moneda de cambio", ya que ha aceptado que Cataluña incluya en el preámbulo de su Estatuto el término nación mientras que la rechaza para Andalucía.

El PA denuncia que este asunto no es menor. "No se trata de una palabrita sin importancia, si los catalanes la meten en el preámbulo, aunque no tenga efectos jurídicos, apelarán constantemente a eso para lograr la singularidad," sostienen.

A esta circunstancia unen el hecho de que los socialistas hayan destacado que el borrador del Estatuto cuenta con un 80% de consenso, lo que, a su juicio, da a entender fuera y dentro de la comunidad que "que en Andalucía aceptamos la discriminación, asimetría y desigualdad; Decimos que no, que queremos estar al mismo nivel", enfatizó Julián Álvarez. Fuentes del partido han apostillado que la información que les llega de los propios nacionalistas catalanes es que el acuerdo consiste en que "sólo Cataluña se llame nación, y el resto no". Estas mismas fuentes confiesan: "Si hubiéramos dado una conferencia de prensa para denunciarlo, no habría trascendido, hemos estimado que había que hacer un gesto contundente para que en Madrid y Barcelona quedara claro que la mayoría de los partidos no respaldan lo que dice Chaves sobre financiación y el término nación".

No obstante, el gesto contundente va a tener una corta trayectoria, ya que a la ponencia le queda una sola reunión (el próximo día 30). Después el PA presentará como enmienda a la totalidad de la proposición de ley su proyecto y, como presumiblemente, no saldrá aprobado, lo empleará para presentar enmiendas parciales en la Comisión de Desarrollo Estatutario.

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Fuentes de la dirección andalucista señalaron que Chaves y Álvarez han mantenido una conversación telefónica sobre el alcance del abandono de la ponencia y todo ha quedado muy abierto. Álvarez no ocultó ayer su malestar por el hecho de que el PP les siguiera en el abandono de la ponencia "cuando estamos en las antípodas", pero dijo no tener control sobre los movimientos de los demás. Otros dirigentes reconocen el peligro de que el PP se les pegue, pues el PSOE no va dejar pasar la oportunidad de denunciar una alianza oculta: "Sabemos que nos jugamos muchos, pero vamos a correr el riesgo, no renunciaremos a marcar nuestra propia línea y asumiremos las consecuencias".

Los dirigentes de otros partidos se pronunciaron también sobre la polémica. Mientras Chaves dijo que el PA había "arriado la bandera del andalucismo" y pidió la vuelta de PA y PP a lo órganos de discusión, el popular Javier Arenas dijo que el PP "no ha abandonado la ponencia", pese a marcharse junto al PA y no asistir a la última reunión.

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