Los partidos catalanes y el PSOE cierran uno de los capítulos básicos del Estatuto

Los partidos catalanes que aprobaron la propuesta de reforma del Estatuto y que ayer negociaron juntos con el PSOE concluyeron que el acuerdo sobre cómo se regularán en el futuro los poderes de las autonomías y de la Administración central en materia de competencias compartidas supone un gran paso para un pacto global sobre el nuevo Estatuto de Cataluña. La inclusión del término nación en el articulado y el modelo de financiación siguen constituyendo un motivo que impide el acuerdo definitivo.

El acuerdo básico de ayer, alcanzado tras cuatro horas de reunión celebrada en el Congreso, se materializó en el artículo 111, que define las competencias compartidas entre el Estado y la Generalitat y el poder de cada Administración sobre las mismas.

El acuerdo al que llegaron ayer ambas delegaciones pone límites a las normas básicas del Estado (de obligado cumplimiento para todas las comunidades), que sólo podrán regularse a través de leyes, salvo excepciones.Tanto la delegación socialista como la que integraban los partidos catalanes coincidieron al terminar la reunión en que habían encontrado "la llave" para "entrar en el capítulo de competencias" con grandes esperanzas de un acuerdo definitivo.

Josep Antoni Duran señaló, en nombre de CiU, que con este acuerdo "se tapona una tradicional vía de invasión y usurpación del Estado en competencias autonómicas a través de circulares y normas de rango menor". El portavoz socialista Alfredo Pérez Rubalcaba destacó que el acuerdo alcanzado recoge la jurisprudencia del Tribunal Constitucional.

Por otra parte, medio centenar de jóvenes independentistas lanzaron ayer huevos e insultaron al diputado del PP Jorge Fernández Díaz en Vilafranca del Penedés (Barcelona).