El PSOE alaba la apuesta por el diálogo y el consenso en el discurso del Rey

Los partidos políticos opinaron ayer sobre el tradicional mensaje de Navidad del Rey, del que el PSOE valoró especialmente que hiciera una apuesta por el "diálogo y el consenso", mientras que el PP prestó más atención al hecho de que destacara la necesidad de defender la Constitución "entre todos". Izquierda Unida vio en el discurso de Don Juan Carlos una "excesiva autocomplacencia" al hablar del crecimiento de España, y los principales líderes de CiU y de ERC, Artur Mas y Josep Lluís Carod, coincidieron en elogiar el mensaje por pedir que se rebaje la tensión política.

CiU y ERC elogian que el Rey pidiera en su alocución que se rebaje la tensión política

Izquierda Unida vio en el mensaje "excesiva autocomplacencia y ensimismamiento"

El secretario general del grupo socialista en el Congreso, Diego López Garrido, valoró el discurso del Rey "de optimismo, de esperanza y de futuro", y remarcó en particular el "llamamiento" a combatir la exclusión social que hizo don Juan Carlos. Aseguró compartir con él la "necesidad" de que los problemas políticos y sociales "se superen" con el diálogo y el consenso, el cual recordó que es "una característica de la nueva etapa política". En la misma línea, el coordinador de la Ejecutiva del PSE-EE, Rodolfo Ares, destacó "la apuesta por el diálogo y el consenso para resolver las discrepancias" desde "el respeto a las reglas de juego, en el marco de la Constitución".

Desde el Partido Popular, su secretario ejecutivo de Comunicación, Gabriel Elorriaga, afirmó que el Rey expresó "los sentimientos y las preocupaciones de la mayoría de los españoles" e hizo hincapié en que destacara el papel de la Constitución en la convivencia y "la necesidad de preservarla entre todos". Elorriaga añadió que cobraban especial relevancia sus referencias a los "éxitos" de los españoles y al papel que en estos éxitos "ha cumplido la Constitución", y elogió que hubiera hablado de los desfavorecidos, los problemas sociales y de la inmigración.

Elorriaga también señaló que el PP coincide en la necesidad de "superar rencores y divisiones" y que los valores de reconciliación, concordia y consenso que hicieron posible la Transición "imperen en los debates y reformas que están planteados".

Los principales líderes de CiU y de ERC, Artur Mas y Josep Lluís Carod, coincidieron en elogiar el mensaje navideño del Rey por pedir que se rebaje la tensión política. Al presidente de CiU, Artur Mas, el mensaje le pareció "bien", porque "si hay algo que intentamos desde nuestra forma de entender la política es evitar la crispación y la bronca". En similares términos se expresó el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, quien dijo coincidir con el Rey al diagnosticar que "hay demasiada confrontación en la vida política española" y reivindicar "el diálogo y la cultura que inspiró la Transición como solución para resolver los problemas que todavía quedan pendientes en España", como la reforma del Estatuto.

El presidente de ERC, Josep Lluís Carod, indicó: "Desde ERC celebramos el llamamiento hecho ayer por el jefe del Estado, porque rebajar la tensión política es algo imprescindible". "Desde aquí", añadió, "siempre hemos intentado eso, porque la víctima de la tensión política siempre es Cataluña y, como decía el presidente Companys, los enemigos de Cataluña son los enemigos de la libertad, por lo que la moderación formal es muy necesaria".

El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, vio "excesiva autocomplacencia y ensimismamiento" en las palabras de don Juan Carlos, en las que, no obstante, reconoció un discurso "de normalidad democrática frente a tanta crispación artificiosa". Llamazares lamentó la "autocomplacencia" del Monarca al elogiar el crecimiento de España porque, aunque es cierto, apuntó, "todavía hay muchos problemas, y no sólo de pobreza, sino también de desigualdad, especialmente en el mercado laboral"; el "ensimismamiento" lo localizó en las referencias a su nieta Leonor. Respecto a la Constitución, advirtió de que "es de todos" y por ello "ninguna fuerza política debe apropiársela", y puede reformarse. En este sentido, el portavoz de la Presidencia de Ezker Batua (EB), Mikel Arana, apostilló que las alusiones al orden constitucional del Rey son una "incursión inaceptable" en la política, y afirmó que el discurso fue "escrito al dictado de La Moncloa".

Josu Erkoreka, portavoz del PNV en la Cámara Baja, aseguró compartir los "valores universales" que el Rey puso ayer de relieve, y apuntó que, como nacionalista vasco, su deseo es que "se hagan efectivos" también en Euskadi. "Ha sido un discurso muy navideño, optimista, esperanzado, cargado de referencias a valores como la libertad, la justicia, la igualdad, los derechos fundamentales y la convivencia", manifestó. Así como el Rey los ha vinculado "al Estado español, yo, como soy nacionalista vasco, quisiera vincularlos a mi patria, a mi nación, a Euskadi", dijo Erkoreka.

El coordinador de la Ejecutiva del BNG, Francisco Jorquera, calificó de "positiva" la apelación al diálogo del Rey que, a su juicio, tiene que servir también para "acometer la transformación política de la Constitución".

El presidente de Coalición Canaria, Paulino Rivero, declaró que la apelación de don Juan Carlos al sosiego y el entendimiento "es más acertada que nunca" por el actual nivel de crispación política "sin precedentes en la etapa democrática".

Los andalucistas explicaron que esperaban que el discurso de Navidad del Rey Juan Carlos hubiera sido "más atrevido", incidiendo más en el "reconocimiento de los diversos pueblos" de España, según la vicesecretaria del Partido Andalucista (PA), Antonia Agudo.

El presidente de Andalucía Acoge, Abderramán Essadi, se mostró confiado en que las palabras que el rey dirigió a la población inmigrante "se hagan realidad", aunque lamentó que "por el momento, los inmigrantes somos personas de segunda y de tercera".