El Atlético, en manos de su quinto portero
Leo Franco se lesiona y Roberto, guardameta de 19 años, le sustituye contra Osasuna
Parece que al Atlético le ha mirado un tuerto. Ha fichado a Kezman, Petrov y Maxi, todos ellos reputados delanteros, pero sólo ha marcado 17 goles en 16 jornadas, con lo que iguala su peor registro goleador de la historia a estas alturas de la Liga, el de la campaña 1981-1982. Pierde tantos puntos en los últimos minutos que si los partidos durasen 80 en lugar de 90, iría tercero. Y Leo Franco, su meta titular, ha recaído de su lesión del recto anterior del muslo derecho. También están lesionados Cuellar, su suplente, y Galán, del filial. Falcón, su sustituto en los dos últimos partidos, está sancionado. Y a Bianchi, el entrenador, no le ha quedado más remedio que rebuscar en la cantera y llevarse a Pamplona, donde el Atlético juega hoy (Televisiones autonómicas, 22.00) contra Osasuna, a dos juveniles: Roberto, de 19 años, que será titular, y Basilio, su suplente en el Aviación.
"Si nosotros tenemos algo que podamos poner en el libro Guinnes de récords es tener tres arqueros lesionados y encima el cuarto suspendido", dijo ayer el técnico. "Lamentarse no sirve de nada. Confio en Roberto", afirmó. Bianchi, optimista, ve la botella medio llena: Roberto, su quinto portero, es internacional sub 20. Los pesimistas ven la botella medio vacía: el guardameta debuta en El Sadar, donde el Osasuna ha ganado sus ocho últimos partidos. Ricardo, sin embargo, no tiene dudas: "Yo confío mucho en mí", dijo ayer. Y en el Atlético nadie se extrañó.
"Cuando llegó aquí", recuerda Ángel Mejía, ex guardameta del Atlético y preparador de porteros; "al segundo día ya me decía los ejercicios que le iba a mandar antes de que yo hablara. Iba de enteradillo, pero sin maldad, para demostrar su interés. Hasta que le dije: 'Oye, que el de rojo [el entrenador] soy yo y el de azul eres tú". Desde entonces, muchas cosas han cambiado. Sobre todo una: Roberto ha crecido. Y mucho. Supera el 1.90. "Tiene mucha personalidad por alto. No se arruga. Tiene que mejorar sus estiradas. Por su envergadura, le cuesta cubrir los ángulos. Hay que achucharle para que estire los brazos". El Atlético, un equipo con mala suerte, viaja sin Kezman, lesionado. Con Torres buscando el camino del gol. Y con Bianchi,discutido por la afición y respaldado por la directiva, en manos de un chico de 19 años.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.