Lladró estrena en Madrid su nuevo modelo de tienda, planteada como un teatro

Lladró estrenó ayer en Madrid el nuevo modelo de tienda que pretende extender a las 18 tiendas propias que la firma de porcelanas tiene en propiedad en otras tantas ciudades de todo el mundo. "Una tienda planteada como un teatro, en el que las figuras encuentran el escenario idóneo donde contar su historia, presentadas en un contexto y con una iluminación concebidos para impactar al espectador y seducirlo", detalla el fabricante de porcelanas a través de una nota.

La remodelación de la tienda de Lladró en la calle Serrano de Madrid ha supuesto una inversión de un millón de euros y su diseño fue encomendado a un estudio parisino, Landmark, especializado en "arquitectura conceptual" y que ha trabajado antes para firmas como Cartier o Van Cleef, según la empresa. La tienda de Lladró en Valencia, en la calle Poeta Querol, será remodelada en breve.

La remodelación de las tiendas de porcelanas forma parte de la estrategia diseñada por el consejero delegado de Lladró, el francés Alain Viot, para intentar relanzar un producto cuyas ventas han caído en picado desde hace cinco años.

Los trabajadores de Lladró aceptaron recientemente extender a 2006 la reducción de dos meses de su jornada laboral para intentar aliviar los almacenes de la firma en la localidad valenciana de Tavernes Blanques. La reducción de jornada se aplicó este año tras una reorganización de la plantilla para recortar la producción un 20%. Pero ha tenido un efecto sorprendente. La plantilla de los talleres ha mejorado su productividad un 12% al trabajar sólo cuatro días por semana.