ERC advierte de que romperá con el PSOE si se escora a la derecha

Esquerra Republicana (ERC) revalidó ayer, en palabras de su secretario general, Joan Puigcercós, su apuesta por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, pero le advirtió de que un escoramiento político hacia la derecha, con CiU como sostén parlamentario, daría al traste con esta colaboración. "Sería un error que el PSOE cambiara de aliados por las presiones y chantajes del PP", comentó el dirigente republicano.

Los independentistas asisten con cierto recelo al acercamiento del PSOE hacia Convergència i Unió, sus tradicionales adversarios en Cataluña. Y ayer mismo aceptaron a regañadientes las críticas que le lanzó la víspera el presidente del Gobierno durante el acto de conmemoración del Día de la Constitución. Zapatero dijo no compartir algunos gestos de Esquerra, como reclamar al Rey que pida perdón por el franquismo, el encadenamiento ante la sede de la emisora Cope o que las juventudes se dediquen a arrancar páginas de la Constitución. "Si le gustara todo de Esquerra [Zapatero] tendría el carné de militante", comentó de forma irónica Joan Puigcercós.

"Lo que cuenta es lo que hemos votado", subrayó el secretario general de ERC y presidente del grupo parlamentario en el Congreso. Por ahora, los republicanos no van a cambiar su "apuesta estratégica" de apoyar parlamentariamente al Ejecutivo socialista por la "oportunidad que supone para hacer cambios importantes que van más allá del Estatuto", entre los que citó la reforma del modelo de Estado y el giro social con medidas como el matrimonio homosexual.

Si el PSOE sigue por esta senda, continuó Puigcercós, no deberá preocuparse por los apoyos en el Congreso. En cambio, si los socialistas optan por un escoramiento hacia la derecha, forzados por una hipotética alianza con CiU, Esquerra Republicana se desentendería de sus alianzas parlamentarias.

"Es legítimo que el PSOE quiera cambiar de alianzas, pues nosotros no buscamos la exclusividad", respondió Puigcercós a los intentos del PSOE de ampliar sus apoyos en el Congreso. Pero esta medida, a su juicio, sería un error pues no detendría los ataques del PP. "Cambiar de alianza no evitará que el PP use cualquier pretexto para ir contra Zapatero. Porque lo utiliza todo, todo, todo. Sería someterse a las presiones y al chantaje [del PP]", agregó.

Contra Zapatero

"El problema no es Esquerra, ni los extremos ni la necesidad de recuperar un centrismo virtual. El problema es del PP, que no ha aceptado los resultados del 14-M [elecciones generales]", proclamó Puigcercós. Ante la situación de presión del PP -partido al que definió de autoritario y de actuar contra la democracia-, el secretario general de Esquerra Republicana dijo que la única respuesta era revalidar su colaboración con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

No obstante, y como respuesta a los comentarios del martes, Puigcercós enumeró una retahíla de "gestos" del PSOE que tampoco gustan al partido independentista. Entre estos citó su tardanza en denunciar el boicoteo a los productos catalanes o los "excesos" de algunos dirigentes como José Bono (ministro de Defensa), Juan Carlos Rodríguez Ibarra (presidente de Extremadura) o Francisco Vázquez (alcalde de A Coruña), más partidarios, dijo, de alianzas con la "derecha", en referencia a CiU, pese a "denominarse la izquierda del PSOE".

También citó como desacuerdos la "misma inercia que en el PP de la estructura del Estado y de los ministerios" y la escasa capacidad de reacción del Ejecutivo central para defender la escuela pública frente a los ataques y manifestaciones del Partido Popular. Sin embargo, se esforzó en restar importancia a estos "gestos" porque lo que importa, en su opinión, es que este "Gobierno es bueno para España y para Cataluña" y "quedan muchas cosas por hacer".

Convergència i Unió, uno de los partidos blanco de las críticas de Puigcercós, recomendó a los dirigentes de Esquerra Republicana "calma y moderación". El secretario general de los nacionalistas, Josep Antoni Duran Lleida, afirmó: "Que no se pongan nerviosos porque CiU no piensa sustituirles como socio estable en esta legislatura".

El ministro de Industria y primer secretario de los socialistas catalanes, José Montilla, coincidió con Puigcercós en que lo único que une a socialistas y Esquerra es lo que votan juntos en el Congreso y pidió relativizar actos como el de las juventudes republicanas de arrancar páginas de la Constitución. "Lo hacen cada año", sentenció.

En cambio, el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, expresó su "desagrado" por esa protesta y la tildó de "innecesaria".