Irán aprueba la construcción de una nueva central nuclear

El régimen islámico de Irán construirá una nueva central nuclear, la segunda, en el suroeste del país, pese a las presiones internacionales sobre su programa atómico. Según informó ayer la televisión estatal, la decisión de construir la nueva central fue aprobada el pasado domingo en una reunión del Consejo de Ministros encabezada por el presidente del país, el ultraconservador Mahmud Ahmadineyad.

El nuevo reactor será edificado en la provincia de Juzistán, en el suroeste del país, y se utilizará para la producción de energía eléctrica. La emisora no dio a conocer más detalles sobre la información, también transmitida ayer por la agencia estudiantil de noticias ISNA. El régimen iraní había informado con anterioridad de que iba a construir su segunda planta nuclear en Bushehr, donde tiene su actual central del mismo nombre y que tiene previsto comenzar a producir energía eléctrica el año próximo.

El anuncio de la construcción de un nuevo reactor se produce mientras crecen las presiones de Europa y EE UU sobre Teherán por sus planes nucleares, que según Washington e Israel tienen fines militares, lo que niegan los iraníes.

El jefe del Estado Mayor israelí, Dan Halutz, instó ayer a que la comunidad internacional continúe presionando a Irán para que no desarrolle su programa nuclear. Por su parte, el ex primer ministro y principal aspirante a la presidencia del partido conservador Likud, Benjamín Netanyahu, no descartó bombardear la central nuclear de Irán, si gana las elecciones del próximo 28 de marzo y es elegido jefe del Gobierno de Israel.

Nuevo ministro de Petróleo

El director del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), el egipcio Mohamed el Baradei, pidió moderación a Irán y a los países occidentales y consideró que una intensificación del conflicto sobre el programa nuclear iraní no sería beneficioso para nadie, ya que "todo el mundo resultaría dañado".

Entre tanto, el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, ha designado a un nuevo candidato para ocupar la cartera de Petróleo, tras ser rechazados por el Parlamento los tres anteriores. El ahora elegido, Kazem Vaziri Hamaneh, ex viceministro de Petróleo, reúne la condición exigida por el Parlamento en anteriores ocasiones de que el futuro titular de la cartera tuviera experiencia profesional en el sector. El petróleo supone el 80% de los ingresos por exportaciones de Irán.

Ahmadineyad anunció una reforma de la industria petrolífera iraní purgando a la mafia que, según él, la dirigía, y su voluntad de hacer llegar sus beneficios a los pobres. Desde su elección, el pasado junio, el nuevo presidente iraní ha sustituido a 40 diplomáticos, entre ellos a muchos embajadores en países clave para Teherán, a los directores de los siete bancos estatales del país y a los negociadores en las conversaciones sobre el contencioso nuclear.