Los jugadores del San Pedro alegan que firmaron contratos fraudulentos "para poder vivir"
Los jugadores que declararon ayer como testigos en el juicio popular que se sigue en la Audiencia de Málaga contra el concejal del PA en Marbella Carlos Fernández, explicaron que aceptaron las condiciones del club UD. San Pedro "para poder vivir". Los futbolistas apelaron a las situaciones a las que se enfrentaban entonces para justificar que firmaran los contratos del citado club por cantidades económicas superiores a las que realmente percibieron: "Tenía que pagar una hipoteca". "Mi hijo pequeño tenía que comer". "Estaba sólo en Marbella", fueron algunas de sus explicaciones ante el jurado.
Los testigos denunciaron que se vieron obligados a aceptar estas condiciones porque "jugaban con nuestras vidas y sabían que firmaríamos lo que ellos quisieran", afirmó uno de ellos, Salvador Bernal, quien añadió que les advirtieron que no contaran nada porque se podían "complicar".
Cuando el ex alcalde de Marbella, Jesús Gil, se enteró de los hechos, los jugadores aseguraron que fueron convocados en el Club Financiero de Marbella y que todos estaban asustados, pero que Gil rompió el hielo con bromas para suavizar los hechos. Durante la reunión, Carlos Fernández intentó negar los hechos y afirmó que los jugadores habían cobrado todo, lo que ellos le rebatieron, siempre según la versión de los testigos. Bernal explicó ayer: "Gil se enfadó mucho, pero fue a más cuando comprobó que la mayoría de las nóminas habían sido dobladas".
A partir de ese momento, según los jugadores, Fernández se quedó cabizbajo en la reunión, asintiendo en algunos momentos, y no volvió a intervenir. Gil preguntó al que fuera entrenador del Atlético de Madrid y de la UD. San Pedro, Cacho Heredia, por qué no le había dicho nada, y éste respondió que era "una imposición".
Dos de los jugadores afectados declararon que sus contratos fueron realizados a través de un intermediario que negoció directamente con Carlos Fernández, y aseguraron que no conocieron al entrenador hasta que su situación profesional estuvo resuelta. Estos testimonios contradicen la versión de Fernández, quien mantiene que todos los jugadores afectados fueron negociados por Cacho Heredia.
En el juicio estaba ayer previsto que compareciera en calidad de testigo el ex alcalde de Marbella Julián Muñoz, quien presentó un certificado médico para excusar su ausencia, tras lo que los abogados personados en el caso renunciaron a su declaración.
Carlos Fernández, ahora en la oposición, fue integrante del equipo de gobierno municipal de Marbella hasta septiembre pasado, cuando fue expulsado por la alcaldesa Marisol Yagüe. El edil está acusado en esta causa de un delito de malversación de caudales públicos, junto a Cacho Heredia y un empleado de la concejalía de Deportes de Marbella.
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