'Rojo' y 'Elizabeth, la reina virgen'
EL PAÍS presenta mañana, viernes, y el sábado, por 5,95 euros cada una, dospelículas de éxito de crítica y público alejadas de las propuestas estéticas habituales
La colección Cine Europeo ofrece esta semana dos películas que compitieron por los Oscar de Hollywood, obtuvieron diversos premios y resonantes éxitos de público, aunque ambas se alejaran de las propuestas estéticas usuales del mercado. La francesa Rojo (1994), última entrega de la trilogía de Krzysztof Kieslowski Tres colores, obtuvo tres nominaciones al Oscar, y la británica Elizabeth, la reina virgen (1998), del hindú Shekhar Kapur, se alzó con siete nominaciones, ganando el de mejor maquillaje: ese año competía con otra película histórica, Shakespeare in love, igualmente ambientada en la segunda mitad del siglo XVI.
Rojo, "un guión perfecto que obtiene una traducción visual insuperable", tal como se dijo en este periódico, es "la culminación de uno de los proyectos más interesantes del cine europeo, la síntesis de las dos películas anteriores, Azul y Blanco, el equilibrio entre poesía y prosa, entre libertad e igualdad", en palabras de Ernst Ribera en Diari de Girona. Sin embargo, Rojo se puede contemplar "con autonomía de sus hermanas mayores, pues se abre y se cierra sobre sí misma".
Una muchacha (Irene Jacob) atropella accidentalmente a una perra; al devolverla a su amo (Jean-Louis Trintignant), descubre que éste es un juez solitario y huraño que se dedica a espiar a sus vecinos. Es tan sólo el principio de una historia en la que se entrecruzan diferentes personajes, víctimas de desamores o desengaños, "criaturas dotadas de belleza e inteligencia, gente excepcional gracias a la excepcionalidad de sus intérpretes y a la generosidad del estilo de Kieslowski, que convierte a cuantos aceptamos su llamada a identificarnos con esas sus criaturas, también en gente excepcional, pues logra una película que ennoblece a quien la ve", en palabras de Fernández-Santos. No fue el único crítico entusiasta. Hal Hinson en The Washington Post escribió que "Rojo es la película de un artista en su apogeo", mientras que Quim Casas en El periódico aseguró que "es una película de admirable serenidad y sencillez, que casi por primera vez en el cine del autor polaco parcela los sentimientos de los personajes en torno a la ternura y la comprensión". Salvador Montalt, que dedicó un libro al estudio de esta película, considera que Rojo "invita al espectador a abrirse hacia lo enigmático para que cada uno, a semejanza de los personajes del filme, ponga en juego su personal escala de valores y, por lo menos, cuestione lo que parece evidente". En definitiva, en palabras de James Berardinelli en Film Review, "una de las películas excepcionales de 1994".
El mismo James Berardinelli opinaba sobre Elizabeth, la otra película que se ofrece esta semana, diciendo que "es un hermoso melodrama histórico con generosas dosis de aventura, intriga y romance, lo que consigue que la atención no decaiga en ningún momento". Biografía del reinado de la protestante Isabel I, que alcanzó el trono tras la muerte de su hermanastra, la católica María Tudor, en condiciones tan frágiles que nunca eliminó el riesgo de perderlo "tanto por un golpe de Estado como por medios tan bizarros como podría ser la flecha de un asesino o un vestido envenenado", como escribió Mick LaSalle. La reina (Cate Blanchett) se encuentra con una legión de problemas: la tesorería mermada, el ejército debilitado, la necesidad de casarse para asegurar su descendencia, y la creciente amenaza de Mary de Guise (Fanny Ardant), que está haciendo acopio de tropas para invadir Inglaterra; la propia corte de Elizabeth está plagada de peligros, como el duque de Norfolk (Christopher Eccleston), que desea su muerte, y el papa Pío V (John Gielgud), que la declara hereje. Elizabeth cuenta sólo con tres aliados: el leal William Cecil (Richard Attenborough), el trepador Francis Walsingham (Geoffrey Rush) y el amor de su vida, Lord Robert Dudley (Joseph Fiennes)... Juan Carlos Paredes valoró en Reseña "las sobrias interpretaciones, los elegantes decorados, el fastuoso vestuario y una buena puesta en escena del hindú Shekhar Kapur".
Sara Bernhardt, Bette Davis o Glenda Jackson habían encarnado previamente en el cine a la reina Isabel I. El mismo año de Elizabeth (1998), Judi Dench lograba el Oscar a la mejor interpretación secundaria por su breve interpretación de dicho personaje en Shakespeare in love. Cate Blanchett, por su lado, obtenía el Globo de Oro por esta "superlativa interpretación", en definición de Reel News, ya que tiene "un fuego apasionante y un humor que merecen atención", en elogio de la revista Rolling Stone.
Babelia
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