Un hombre muere tras ser rociado con gasolina por unos desconocidos

Jordi R., un vecino de Bellvei del Penedès (Tarragona), se disponía anteanoche a cerrar el bar que regentaba cuando unos desconocidos le atacaron por la espalda, lo tumbaron a golpes, y le prendieron fuego tras rociarlo con gasolina, según explicó el alcalde de la localidad, Josep Fonts.

La víctima, casado y sin hijos y de 50 años, era un hombre muy conocido en una localidad, ya que el Ayuntamiento contaba con él cuando organizaba actos públicos, por lo que el alcalde de la población se mostró ayer consternado por su muerte y, sobre todo, por la extrema violencia empleada.

Fuentes de la investigación policial prácticamente descartaban ayer que el móvil del crimen fuera el robo. La caja registradora del bar estaba llena de billetes. El método empleado, según el alcalde, responde más al de las mafias o a algún tipo de ajuste de cuentas. Fonts afirmó ayer: "Por lo que yo sé, no estaba metido en nada raro".

Todo sucedió alrededor de las diez y media de la noche del jueves. Uno de los vecinos que presenció el dantesco espectáculo aseguró que vio al hombre en llamas desde su casa. Tan rápido como pudo, el vecino salió para tratar de auxiliar y cubrir al hombre con una manta, aunque su esfuerzo fue en balde. Varios vecinos más observaron lo sucedido y fueron ellos quienes alertaron a los bomberos y también a la policía.

La Guardia Civil llegó al lugar cuando pasaban veinte minutos de la medianoche, para certificar ya la muerte del hombre debido a las graves quemaduras que sufrió. "Parece que le estaban esperando para agredirle", explicó el alcalde.

La víctima tenía su casa apenas a tres calles del bar donde murió, situado en una urbanización alejada del núcleo de Bellvei, de las que proliferaron en la comarca durante los años sesenta. La policía busca desde ayer al autor o autores de esta muerte, que ha dejado conmovida a esta pequeña localidad que está experimentando en los últimos años un constante aumento de población gracias al auge del sector de la construcción.

La Policía Judicial de la Guardia Civil de Tarragona ha iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias de la muerte. El Juzgado número 1 de El Vendrell se ha hecho cargo de las diligencias.