Endesa repartirá 2.000 millones de dividendo pese al recelo de la CNMV

Endesa anunció ayer el reparto de 2.000 millones en dividendos por los resultados de 2005, lo que incluye el reparto íntegro de las plusvalías por la venta de Auna (más de 1.000 millones). La cifra, anunciada en plena OPA de Gas Natural, supone el 28,5% de los dividendos prometidos hasta 2009 (7.000 millones). Como primer paso, la eléctrica ha aprobado el pago a cuenta, el 2 de enero, de 0,3050 euros por título (un 12,1% más que en 2004). Los confusos anuncios de dividendos provocaron ayer que la Comisión de Valores suspendiera la cotización de Endesa cinco horas.

La suspensión de la cotización de Endesa por segunda vez en poco más de un mes (La CNMV la suspendió también el 3 de octubre tras el anuncio del reparto de 7.000 millones en dividendos en cinco años), es un capitulo más en el pulso que libra la eléctrica con los órganos reguladores y con la OPA de Gas Natural como telón de fondo.

El pulso, según confirmó ayer el consejero delegado de Endesa, Rafael Miranda, se mantendrá con la presentación de un recurso ante el Tribunal de Luxemburgo contra la decisión del Colegio de Comisarios de la UE, que acordó el miércoles trasladar el expediente de la OPA de Gas Natural a las autoridades españolas al concluir que la operación no tiene dimensión comunitaria.

El gran asunto del día de ayer para Endesa era la presentación de unos resultados "históricos" en los nueve primeros meses, con un aumento del 32,8% en los beneficios netos (1.556 millones de euros), de un 27% en las ventas (hasta 12.643 millones de euros) y la previsión de superar a fin de año, en un 100%, los resultados logrados antes de amortizaciones e intereses (Ebitda) al contabilizar la venta de Auna a France Télécom. Todo ello con una deuda contenida que, a final de año, se situará en 18.000 millones.

Jornada compleja

Pero el día se complicó. A primera hora, Endesa comunicó a la CNMV el pago de un dividendo a cuenta de los resultados de 2005 de 0,3050 euros brutos por título y que el reparto de las plusvalías por la venta de Auna "se acordará una vez la misma esté recogida en los resultados", sin mencionar que la aprobación del dividendo depende de la junta general de accionistas.

Además, en la presentación de la compañía dirigida a los analistas financieros se detallaba la intención de repartir por el ejercicio 2005 un total de 0,8 euros por acción por las actividades ordinarias más 1,2 euros por el reparto íntegro de las plusvalías obtenidas en la desinversión de activos (venta de Auna principalmente). Total: un mínimo de dos euros por acción por la buena marcha de 2005, equivalentes a 2.000 millones de euros.

Ante la profusión de datos, la CNMV decidió suspender la cotización de Endesa hasta aclarar quién era competente para aprobar el reparto de dividendos y de dónde iba a salir el dinero. El cruce de cartas dejó las espadas en alto. El consejero delegado de Endesa aseguró que se había tratado de un "malentendido" que se había corregido. Por su parte, el vicepresidente de la CNMV, Carlos Arenillas aseguró que la eléctrica había aclarado finalmente sus intenciones tras asegurar, en forma de hecho relevante, que el consejo de Endesa "propondrá en su día a la junta general de accionistas que apruebe el reparto íntegro de dicho beneficio por plusvalías".

Pero levantada la suspensión de la cotización, en torno a las 14.00 horas, Miranda aclaró en conferencia de prensa que la compañía se reserva el derecho de aprobar un nuevo pago de dividendo a cuenta antes de que se celebre la junta general, que no tiene fecha para su celebración. Endesa cerró ayer a 20,97 euros, con una caída del 1,27%.

El PP decidió también ayer entrar en la polémica y cuestionó la actuación de la CNMV. El secretario de Economía y Empleo del partido, Miguel Arias Arias Cañete, aseguró que la suspensión de la cotización "pone en entredicho" la credibilidad del organismo y el papel de su presidente Manuel Conthe.