Altadis suprime en Sevilla y Cádiz los 270 empleos previstos

Un total de 270 trabajadores de las factorías que la compañía multinacional tabaquera Altadis posee en Sevilla y Cádiz abandonaron ayer su puesto de trabajo en cumplimiento del expediente de regulación de empleo aprobado por el Ministerio de Trabajo en agosto de este año.

En el caso de Sevilla, un total de 95 trabajadores dejaron su trabajo. La empresa tiene previsto reducir en un 50% la producción.

La regulación aprobada prevé, en el caso de Sevilla, el cierre de la planta para 2007 y la salida progresiva de los 209 trabajadores integrantes de la plantilla mediante prejubilaciones o bajas incentivadas.

Fuentes de la empresa indicaron que antes de finales de año saldrán otros ocho empleados, de forma que, a finales de 2005, habrán salido de la factoría sevillana un total de 103 empleados mayores de 50 años.

Altadis también suprimió ayer en Cádiz 175 puestos de trabajo. De este recorte, 166 operarios se habían acogido al proceso de bajas voluntarias propuesto por la dirección. Ocho han sido despedidos de manera forzosa y un trabajador ha sido trasladado a la fábrica de Alicante tras negarse a causar baja. De las 175 bajas, 70 eran mujeres. La Junta no concederá 10,8 millones de euros que tenía previsto aportar para el plan social de la regulación por los ocho despidos forzosos de Cádiz.