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El cantante Neil Diamond rejuvenece su sonido

Diego A. Manrique

Neil Diamond se ha aplicado la fórmula Rick Rubin de "rejuvenecimiento de carrera". Rubin, celebrado productor de rock duro, logró que Johnny Cash viviera sus últimos años como una inesperada edad de oro creativa. Con Diamond, de 64 años, el productor ha recuperado su sonido más rítmico, el que le permitió triunfar en los sesenta con Sweet Caroline, Cherry cherry o I'm a believer.

El resultado es 12 songs, que Sony BMG edita en EE UU el 8 de noviembre. Consciente de que Diamond se perdió artísticamente cuando se arropó con grandes orquestaciones y aceptó encargos como la banda sonora de Juan Salvador Gaviota, Rubin le ha grabado con un grupo mínimo, insistiendo para que volviera a tocar su guitarra acústica; uno de los temas, Delirious love, contiene la aportación vocal de Brian Wilson. Aunque sus discos no registren grandes ventas, Diamond sigue funcionando como artista de directo: en lo que va de año, ha ofrecido 66 conciertos que han atraído 930.000 espectadores, con unos ingresos brutos de 63 millones de dólares.

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