El silencio de Rajoy sobre si el PP presentará enmiendas parciales desata un debate interno
Los populares gastarán 500.000 euros en publicidad para pedir un referéndum sobre la reforma
Mariano Rajoy y la cúpula del PP pretenden que la discusión sobre el nuevo Estatuto catalán, al menos hasta el debate del 2 de noviembre en el pleno del Congreso, se limite a intentar convencer al mayor número posible de ciudadanos e instituciones de que el Parlamento catalán no ha aprobado una reforma estatutaria sino una "modificación, encubierta pero a fondo, de la Constitución, avalada e impulsada por el presidente del Gobierno", José Luis Rodríguez Zapatero. Con esa premisa, Rajoy ha anunciado que no dirá hasta después del debate si el PP presentará enmiendas parciales al proyecto catalán, y cuál será el formato de su participación en la Comisión Constitucional del Congreso.
El anuncio de esa posición oficial se producirá, casi con seguridad, en una reunión de todos los parlamentarios del PP que Rajoy ha convocado en Cataluña para el fin de semana del 4 al 6 de noviembre. Pero las ventajas e inconvenientes de las distintas estrategias han sido analizadas ya en un Comité Ejecutivo Nacional, en varias reuniones de maitines y en distintos comités de dirección. Y, ante el silencio de su líder, rara es la reunión informal de dirigentes del PP en la que no surja esta cuestión, acompañada de bastante zozobra sobre si Rajoy "acertará o acabará legitimando al PSOE".
227 enmiendas de supresión
La duda reside en si el PP presentará o no enmiendas parciales en la Comisión Constitucional del Congreso. Rajoy ha dicho que este Estatuto "no se arregla ni con una enmienda ni con 60" y ha insinuado que podría presentar "227 enmiendas de supresión", tantas como artículos tiene el texto. Y hay unanimidad de criterio en el PP en que ese partido debe sentarse en la Comisión Constitucional, pedir muchos informes y comparecencias de expertos, y participar en todos sus debates.
El líder del PP ha pedido que le dejen administrar sus tiempos. Hasta el día 2, según su criterio y el de la cúpula del PP, toca convencer a los ciudadanos -incluidos los votantes y dirigentes del PSOE- de que la reforma "es claramente inconstitucional, reforma la Constitución, rompe el pacto de convivencia de 1978 e impone un modelo de Estado confederal".
Para ello, desde mañana mismo y hasta el día 2, el PP desplegará una campaña publicitaria en prensa, radio e Internet para pedir que todos los españoles puedan opinar sobre esa reforma, es decir, que se someta a referéndum en toda España. Tal consulta popular sería obligatoria si se tratara de una reforma de la Constitución, como sostiene el PP. En esta campaña los populares gastarán 500.000 euros. Tiene como mensaje sistemático que "se va a cambiar la Constitución y todos los españoles tienen derecho a opinar y decidir". El líder de los populares catalanes, Josep Piqué, afirmó ayer que en esta campaña tendrá aspectos diferenciales Cataluña.
Ayer, en la presentación de la campaña, Ángel Acebes, número dos del PP, reprochó que el presidente del Gobierno se reuniera el viernes en La Moncloa con el líder de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, para negociar el nuevo Estatuto. "Se reunieron los protagonistas de este nuevo modelo para España, en el que se quiere que España deje de ser una nación para que pase a serlo Cataluña".
El protagonismo de ERC y el temor a que "ya esté pactado con Carod cómo maquillar el Estatuto" es el principal motivo por el que Rajoy mantiene la incógnita sobre si presentará enmiendas parciales.
El líder del PP ha dicho que "se sintió ridículo" el 14 de enero cuando propuso a Zapatero en La Moncloa un pacto global sobre las reformas estatutarias y de la Constitución y salió de aquella reunión diciendo que estaba "muy satisfecho" porque erróneamente entendió que el presidente aceptaba su oferta. Desde entonces, Rajoy repite machaconamente: "Yo no puedo pactar con quien no quiere pactar conmigo, y Zapatero ha preferido hacerlo con otros". Y añade: "Si quiere, Zapatero sabe dónde puede encontrarme: en la Constitución y en la defensa de la ley".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.