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Reportaje:AULAS

Pedro Jesús no puede ir a clase

Un niño con más del 90% de minusvalía no va al colegio por falta de transporte adecuado

Ginés Donaire

Pedro Jesús no es un niño como la mayoría. No puede hablar ni andar. Pero sí es capaz de captar emociones y sonreír cuando palpa cariño a su alrededor. Tiene seis años y lleva casi toda su vida de hospital en hospital desde que, a los 15 días de su prematuro nacimiento, sufrió una hemorragia cerebral que le causó una hidrocefalia multiquística tabicada, enfermedad que lo tiene postrado en una silla de ruedas con una minusvalía superior al 90%.

Un mes después de iniciado el curso escolar, Pedro Jesús sigue sin poder asistir a clase porque no cuenta con un transporte adaptado a su discapacidad. La Delegación de Educación en Jaén, que ha admitido este problema junto al de otro niño, también de Mancha Real, se ha comprometido a garantizar la escolarización de ambos esta misma semana.

Pedro Jesús Olmo Morales vive en Mancha Real con sus padres. Los dos últimos cursos ha asistido al colegio público San Marcos de su pueblo donde, en compañía de otros niños con minusvalías. Sin embargo, las propias autoridades educativas aconsejaron a su familia el traslado del niño a un centro especializado en la atención de este tipo de discapacidades. Este verano se matriculó en el colegio Psicopedagógico de Jaén, pero dos días antes de iniciarse el curso la dirección del centro comunicó a sus padres que no disponían de transporte adaptado para traer cada día al colegio a Pedro Jesús, todo un varapalo para el pequeño y sus padres. Hay otra niña de cuatro años de Mancha Real en la misma situación, pero aquí la familia sí que ha asumido por su cuenta el transporte.

"Nos dieron otras dos opciones, internarlo en una residencia, a lo que nos negamos porque el niño lleva cuatro años internado en hospitales, o que yo lo llevara y lo recogiera cada día, pero entonces me vería obligado a dejar mi trabajo", se lamentaba ayer el padre del niño, Pedro Olmo, quien trabaja como carpintero en una fábrica de muebles de Mancha Real, a 15 kilómetros de la capital.

La Delegación de Educación tiene concertado el transporte de escolares con discapacidad psíquica con Aprompsi, la Asociación Provincial de Minusválidos Psíquicos, pero este colectivo sólo dispone de cuatro vehículos adaptados y ninguno de ellos cubre la ruta de Mancha Real, donde sí se trasladan otros siete alumnos que no necesitan un vehículo adaptado.

La delegada de Educación en Jaén, Angustias Rodríguez, confía en solucionar el problema esta semana poniendo a su disposición un transporte adaptado. El gerente de Aprompsi, Antonio González, propone ampliar el convenio y contar con un vehículo adaptado para Mancha Real, "pero es algo que no está en nuestras manos", añade.

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