"Avalistas de mi rival ahora quieren votarme"

Alejandro Blanco (Ourense, 1950), presidente de la Federación de Yudo y promotor de la Confederación de Federaciones Olímpicas (Cofede), físico, se ha erigido en el líder federativo indiscutible al rebelarse frente a un panorama directivo de escaso relieve en los últimos años. Sólo ahora ha encontrado un interlocutor válido en Jaime Lissavetzky, el nuevo secretario de Estado para el Deporte, por lo que la colaboración CSD-COE es segura. Lleva como vicepresidente a Luis María Cazorla, catedrático de Derecho Financiero y Tributario, y como tesorero a José Sainz, director económico financiero de Iberdrola.

Pregunta. ¿Se siente ganador con el apoyo mayoritario?

Respuesta. Soy optimista, pero hasta el voto final no se puede decir. Lo que estoy seguro es de que el programa es bueno y no es el mío, sino el nuestro, compartido por mucha gente. No soy el candidato, somos un equipo. Se ha hecho un programa y luego se ha elegido a la persona para presidirlo. En cuanto al resultado, yo estoy feliz en el yudo y nunca me habría presentado sin apoyo mayoritario y contra intereses políticos.

P. ¿Qué ofrece?

R. Un nuevo COE, una ilusión compartida es el lema. Una gestión más moderna, dinámica y transparente. Aprobaremos un códico ético. Más apoyo al deporte, a las federaciones y al campo internacional.

P. No es muy diferente al de su rival.

R. De diez puntos, es posible que ocho o nueve sean iguales. Pero Mercedes Coghen tiene derecho a presentarse y eso significa que, gane quien gane, podremos colaborar.

P. ¿Espera que los votos sean consecuencia lógica de los avales?

R. Sí, pero nunca se sabe. Ha habido avalistas de la otra candidatura que me han dicho que me votarán y les he dicho que no, que cumplan lo pactado.

P. ¿Tiene sentido un rival que sale de las federaciones olímpicas cuando éstas ya tienen candidato?

R. Tras el fuerte movimiento de las federaciones olímpicas se pudo pensar que éstas sólo querían la presidencia y nada más. Pero esa inquietud se ha diluido porque el programa es abierto y pienso, por ejemplo, que la mitad de las 30 federaciones no olímpicas ya lo apoyan.

P. ¿Qué posición ocupará en el futuro Iñaki Urdangarín, que deja la vicepresidencia al irse el presidente, José María Echevarría, que le designó?

R. Él ha comentado que no es su momento y no tengo más que decir. Pero está clara su capacidad y proyección. Algún día será el presidente del COE. He hablado con él y hemos quedado en colaborar sin ningún problema, como con el anterior presidente o con Juan Antonio Samaranch, que es siempre clave. Todos estamos en el mismo barco y somos necesarios.