Desarticulada en Valencia una banda organizada de corte neonazi que vendía armas por Internet

Un empresario de 35 años, que residía en un chalé en la zona de Calicanto, aparece como cabecilla de una banda neonazi que ayer desarticuló la Guardia Civil en Valencia y en la que, al cierre de esta edición, eran al menos 16 los detenidos, todos españoles. En torno al ideólogo, se había formado un grupo antisistema de extrema derecha cuyas proclamas propagaba a través de páginas web en las que además vendían armas, objetos de autodefensa (como sprays, puños, machetes). La investigación ha estado coordinada por la titular del Juzgado número uno de Carlet. Las detenciones se practicaron en la ciudad de Valencia y al menos otros tres municipios de la provincia, entre ellos Canals, donde se asentaba el grueso de la organización. En los distintos registros practicados por agentes de la Guardia Civil (la operación la ha desarrollado la Comandancia de Valencia con apoyo de los servicios centrales de Madrid) permitieron incautarse de abundante material en soporte digital, panfletos y armas.

Fue la detección de las páginas en Internet la que puso sobre la pista a la Guardia Civil hace más de seis meses. A partir de ahí, siguió el rastro por la red para llegar al núcleo de un grupo del que algunos de los integrantes tienen antecedentes por robos pequeños y han sido identificados como elementos habituales de episodios violentos contra inmigrantes, pintadas en colegios o como reventadores de manifestaciones en varios municipios de la provincia. La operación continúa abierta y según fuentes de la investigación las detenciones pueden llegar a ser casi 30. Los primeros datos, según fuentes de la investigación, describen un potente grupo organizado, perfectamente jerarquizado, con claros objetivos, que acumula ventas de armas a través de internet y que realizaba captaciones y distribución de elementos de autodefensa en distintos municipios entre grupos de jóvenes. Los detenidos tienen entre 25 y 35 años.