Arenas busca un laboratorio de ideas

¿Qué espera Javier Arenas de Andaluces por el cambio? Fundamentalmente, ideas. Tras casi 25 años de historia autonómica, la derecha andaluza no ha dado con la tecla para ser alternativa. En la siete elecciones autonómicas celebradas, los sucesivos candidatos del PP (al principio AP) han cosechado derrotas más o menos abultadas. Antonio Hernández-Mancha, Gabino Puche, Javier Arenas y Teófila Martínez han sucumbido ante los aspirantes socialistas. Sólo una vez, en 1996, con Arenas como candidato, el PP tuvo el viento de cola de las encuestas para lograr la victoria, pero el reagrupamiento del voto de izquierdas en torno al PSOE frustró su ambición. Arenas, tras ocho años en la política nacional, ha vuelto para intentar resucitar un proyecto que se hundió en el abismo en 2004 y busca en la calle una alternativa a las recetas endogámicas, que no han encontrado eco en la sociedad andaluza.

Arenas empezó a rumiar el proyecto de Andaluces por el cambio nada más aterrizar, por segunda vez, como líder regional del PP, en abril del año pasado. En una operación mimética a la que hizo en 1993, Arenas empezó a hablar de que el PP tenía que abrirse a la sociedad, ensanchar su base social y atraer a independientes.

El primer paso fue la constitución de distintos foros para dar cobijo a estas personas. Así, el PP ha creado los foros de Economía, Turismo, Sanidad, Educación, Universidad y el de reformas institucionales. "El embrión de Andaluces por el cambio han sido los foros", afirma una fuente del PP. El fichaje más sonado hasta la fecha ha sido el de Isidoro Beneroso, ex presidente de El Monte, un hombre procedente del PSOE, partido del que fue expulsado tras el pulso que echó al Gobierno de Manuel Chaves cuando dirigía la caja sevillana.

El siguiente paso de Arenas fue anunciar, antes del verano, la creación de Andaluces por el cambio, que se ha conformado como una asociación independiente del PP, pero que en la práctica pretende ser un laboratorio de ideas de este partido. Para el PSOE, la asociación no es más que un intento de Arenas de maquillar a la derecha tras el fracaso de las siglas del PP.

Arenas persigue que en esta asociación se impliquen personas que no quieren militar en ningún partido, pero que consideran que Andalucía necesita un cambio de gobierno, se supone que a favor del PP. "Arenas quiere que aporten ideas, documentos y las propuestas que consideren necesarias para la alternancia", añade esta fuente.

Pese a que su origen es claramente partidista -ayer fue presentada en Málaga en un algo muy parecido a un mitin-, el PP quiere que la asociación Andaluces por el cambio tenga un perfil de independencia. La asociación tendrá un presidente regional (todavía no decidido, según el PP) y un delegado y una sede en cada una de las ocho provincias. Una de las incógnitas todavía no conocidas es cómo se va a financiar la asociación.

Comparaciones

En el PP andaluz rehúsan cualquier comparación con la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), el semillero de ideas de la derecha que auspició José María Aznar. "No tiene nada que ver. La asociación va a ser un centro de debate focalizado en Andalucía", comentan en el PP.

En el primer listado de firmantes de Andaluces por el cambio figuran abogados, profesores (algún ex alto cargo del PP como Julio Iglesias de Ussel), empresarios, sindicalistas o el ex árbitro malagueño Antonio Jesús López Nieto.

Acerca de la posibilidad de que la asociación sea algo más que un laboratorio de ideas y se convierta en una cantera de políticos, en el PP se recurre a la fórmula de compromiso del "no se descarta". Arenas tendrá la última palabra.