Roma
Como una estatua del Coliseo
SEIS PAÍSES y una decena de ciudades recorrieron Julio Vera y Irina Martínez con un billete de Interrail de dos zonas. De Tomares, en Sevilla, a Mikonos, en Grecia, pasando por Francia, Bélgica, Luxemburgo e Italia en trenes de segunda y ferries. A la mitad del viaje, recién llegados a Roma, Julio se subió a un pedestal del Coliseo y ella lo retrató como un discóbolo de carne y hueso. Un recuerdo entre los cientos obtenidos de una experiencia extenuante, de un mes de dormir en trenes, puertos "y donde fuese", recuerda Julio. Pero no se arrepienten de una experiencia por la que pasaron en 2004 unos 13.000 viajeros españoles. "La verdad es que el viaje resultó baratísimo. En cuanto tengamos algo de tiempo, que es lo que empieza a faltarnos, nos hemos prometido repetir". Y entre todas las ciudades visitadas, una preferida: Brujas (Bélgica). "Allí tienes la sensación de que todo es muy auténtico".
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