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El alcalde de Almería pide la ayuda del Ejército para recoger la basura tras seis días de huelga

Los trabajadores aceptan respetar los servicios mínimos al decretarse la emergencia sanitaria

El alcalde de Almería, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador (PP), solicitó ayer a la Subdelegación del Gobierno la "inmediata" colaboración del personal y medios mecánicos del Ejército para que contribuyan a la limpieza de la ciudad, tras seis días de huelga "ilegal" por parte de los trabajadores de Urbaser, la empresa concesionaria del servicio, que hasta anoche no habían respetado los servicios mínimos. La petición municipal se apoya en un decreto de emergencia que la Junta de Andalucía instó ayer al alcalde a emitir ante el deterioro de la situación.

El Ayuntamiento calcula que en las calles de Almería, que estos días celebra su feria en honor a la Virgen del Mar, puede haber unas 1.000 toneladas de basura acumulada. Y todo pese al trabajo de alrededor de un centenar de operarios contratados por el Consistorio que llevan recogidas desde el tercer día de huelga unas 800 toneladas. Nueve trabajadores de Urbaser -la plantilla pide subidas salariales conformes al IPC, que se regule una paga de beneficios y una equiparación de categorías laborales- fueron detenidos el sábado pasado por desórdenes públicos. Desde entonces, los trabajadores contratados por el Ayuntamiento realizan sus tareas con protección policial.

El decreto de emergencia emitido por la Alcaldía supone reconocer que la situación de alerta sanitaria supera las competencias municipales. "El Ayuntamiento, a pesar de haber ejecutado algunas acciones puntuales de limpieza, necesita y precisa de la colaboración del Ejército para que a la mayor brevedad posible la ciudad pueda estar en condiciones"", explicó Rodríguez-Comendador.

El subdelegado del Gobierno central, Miguel Corpas, mostró su interés en colaborar con la ciudad, según el regidor, si bien no ha habido respuesta oficial todavía. Corpas indicó a este periódico que ha pedido un informe urgente a la Abogacía del Estado para saber si la intervención del Ejército es posible.

El alcalde sostuvo que la intervención del Ejército se mantendría "independientemente" de una resolución formal del conflicto, dado que la prioridad es "devolver a la ciudad el estado de limpieza" cuanto antes para evitar enfermedades. Representantes de la empresa y los trabajadores, reunidos anoche por la Consejería andaluza de Empleo, no llegaron a un acuerdo para resolver el conflicto laboral. Pero, a la salida del encuentro, el presidente del comité de empresa, Francisco Acuña, anunció que empezarían a respetar desde anoche los servicios mínimos decretados por la Junta "en un gesto de buena voluntad".

Acuña agregó que los trabajadores estarían dispuestos a desconvocar la huelga si la empresa retira los expedientes disciplinarios abiertos por el incumplimiento de esos servicios. Urbaser acumula ya una sanción de 126.000 euros del Ayuntamiento por los seis días consecutivos de incumplimiento.

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Limpieza

El representante de Astilua, el sindicato mayoritario en la empresa, matizó que sólo con el inicio de los servicios mínimos será muy difícil limpiar la ciudad. A juicio de Acuña, si hubiese habido un acuerdo con Urbaser, los trabajadores hubiesen podido retirar toda la basura hoy mismo "con turnos continuos". "Pero la empresa no tiene interés en solucionar el conflicto".

El alcalde desgranó la labor realizada por el equipo de gobierno para mediar entre trabajadores y empresa desde meses atrás. Así, aseguró que el Consistorio logró evitar la huelga en plena celebración de los 15º Juegos Mediterráneos e instó a ambas partes a negociar, días antes de que se produjera esta protesta. Rodríguez-Comendador aseguró también que, desde el primer día de huelga, el Ayuntamiento pidió a la Junta que, a través del Sercla, decretase los servicios mínimos de limpieza, que fueron publicados "el mismo día del comienzo de la huelga".

El concejal de Mantenimiento y Servicios Urbanos, Esteban Rodríguez (GIAL), abundó en las críticas a la actuación de la Junta de Andalucía en el asunto y aseguró que ha ido "a remolque" del Ayuntamiento almeriense.

"Cuando se fijan los servicios mínimos por parte de la dirección de Empleo tuvimos que decirles que cuáles eran, porque no se habían publicado en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía. Y ante una manifestación por escrito de los inspectores de Salud del Ayuntamiento vuelve a reaccionar la Junta. Nunca sale directamente de la Junta una resolución para colaborar en este conflicto", denunció el edil.

Un hombre se tapaba la nariz, ayer, al pasar junto a la basura acumulada en las calles del centro de Almería.
Un hombre se tapaba la nariz, ayer, al pasar junto a la basura acumulada en las calles del centro de Almería.EFE

Riesgos evidentes

Lo que ha motivado la resolución de la Delegación de Salud de la Junta de Andalucía han sido los informes municipales y de la propia Junta sobre los riesgos derivados de la acumulación de basuras que dependen del volumen, de los días de acumulación y también de la temperatura. El principal riesgo de todos es el de lixiviados, líquidos que se producen y que pueden contaminar por efecto del calor y la descomposición de la materia orgánica. Además, está la proliferación de insectos que, amén de las picaduras, pueden ser transmisores de enfermedades.

Por otro lado, el volumen importante de basuras con cristales puede motivar lesiones a los viandantes por cortes. También hay riesgo de incendio por la concentración de materiales inflamables, así como acumulación de gases tóxicos que conllevan riesgos sanitarios. En días de viento hay elementos que pueden producir accidentes como bolsas de plástico. Y, por supuesto, está el riesgo de insalubridad general por el cúmulo de desechos.

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