Una visita tras siete años de espera

Los vecinos preparan minuciosamente los últimos detalles para el traslado, previsto para mañana, de la virgen del Rocío desde la aldea, donde aguarda el momento vestida de pastora, hasta Almonte (Huelva). A los almonteños les gusta decir "la venida de la virgen", porque, según la tradición, la patrona quien visita el pueblo. Esta cita se repite cada siete años desde 1949. Fue entonces cuando se fijó el periodo de manera oficial, sin que se conozca con exactitud el motivo.

El director del Centro de Estudios Rocieros, Julio Flores, señaló ayer que el traslado de la Virgen ha tenido históricamente un carácter rogativo, para pedir protección por alguna desgracia acaecida en el pueblo, ya fuera una epidemia, hambre o sequía, y se realizaba de forma irregular: había años en que la imagen se desplazaba en varias ocasiones a Almonte, y, en cambio, períodos largos en los que permanecía en su ermita.

La primera salida de la imagen hacia Almonte data de 1607 e intentó paliar una fuerte sequía. "La razón fundamental de la mayoría de los traslados ha sido por la sequía", explicó Julio Flores. La virgen viajó a Almonte de forma consecutiva de 1902 a 1907, el período de mayor número de desplazamientos. Sin embargo, entre 1809 y 1951 estuvo 42 años sin ir al pueblo.

Coincidió con los gobiernos liberales del siglo XIX, cuando "se apostaba menos por estas cosas", indicó Flores, quien ha recogido esta tradición en el libro El Rocío del ayer. 1900-1960. "La virgen se traía de inmediato, se iba a por ella en la misma tarde en que se había adoptado la decisión y al día siguiente ya estaba en el pueblo. Entonces era todo improvisado, nada de la dimensión que tiene actualmente este acto", añade. Hasta 1887 no hay referencia documental sobre el exorno de las calles para la llegada de la imagen.

Los vecinos de Almonte, en cambio, han engalanado la localidad con 180.000 flores de papel para recibir a su patrona. Se espera la presencia de unas 600.000 personas. Además, se ha construido para la ocasión la réplica de una iglesia de estilo gótico, obra de Juan Antonio Acosta, carpintero de Almonte, con detalles de las principales catedrales europeas. La estructura, hecha a base de cartón y madera, está conformada por cuatro bóvedas, dos portadas y un templete central. La cantidad de vidrieras que la integran permitirá una espectacular combinación de luz en el interior. Las paredes tienen 20 metros de altura.

La salida de la virgen se producirá en el momento en que los almonteños salten la verja. En 1998 salió a las 15.30. Antes de iniciar el camino, la talla se cubre con un capote y el rostro se tapa con un paño. El traslado se realiza a hombros de los almonteños durante toda la noche. El momento culminante del recorrido se producirá cuando la comitiva llegue a El Chaparral, a la entrada del pueblo. Se coloca la imagen en un altar y se le retira el paño coincidiendo con los primeros rayos del sol. Es un momento emotivo en que el pueblo está exultante y se produce la salve de escopetas en la que los hombres lanzan tiros al aire generando un enorme estruendo que simboliza la alegría de los almonteños por tener a su patrona ya en el pueblo. A partir de ahí, la imagen se instala en la parroquia en la que permanecerá durante los próximos nueve meses.

Salida de la virgen de El Rocío. Día 19 de agosto. Ermita del Rocío (Huelva). Llegada: Día 20. El Chaparral en Almonte al amanecer.