Urkullu subraya que "no es el momento" de pactar con el PSE
El portavoz de la ejecutiva del PNV, Iñigo Urkullu, ha asegurado en una entrevista con la agencia Europa Press que "no es el momento de pactar con el PSE", en alusión a la propuesta que el presidente del Senado y líder de los socialistas alaveses, Javier Rojo, trasladará al congreso de su formación en octubre. Urkullu puntualiza que los socialistas deberán aclarar si hablan de acuerdos de gobernabilidad o sobre normalización y precisa que su formación no está dispuesta a cerrar "pactos de gobierno", aunque sí a alcanzar consensos sobre pacificación y normalización, pero incluyendo a otros partidos.
El portavoz peneuvista interpreta que la propuesta de Rojo responde a que "en el PSE y en el PSOE puede haber personas" con "algún cargo de conciencia" por haber "regalado el gobierno de determinadas instituciones", como el Ayuntamiento de Vitoria o la Diputación alavesa.
Insiste en que "no es el momento" de pactar con el PSE. "Estamos en el ecuador de la legislatura municipal y foral y acabamos de arrancar la autonómica en base a un Gobierno tripartito", dice el dirigente peneuvista. [Rojo precisó ayer que en ningún momento ha hablado de pactos de gobierno, sino de "acuerdos" para evitar que EHAK tenga la llave en el Parlamento vasco].
Dialogar con ETA
Sobre la pacificación y los movimientos del Gobierno central, Urkullu le emplaza a hablar con ETA, aunque la banda no abandone las armas. "Es fundamental que el Gobierno español dialogue con ETA, si es que ese diálogo todavía no existe", dice. Para Urkullu, las exigencias sólo se pueden hacer cuando se aborde una negociación, pero, mientras ésta se produce, es "aconsejable que exista, cuanto antes, una interlocución" entre el Ejecutivo y la organización terrorista.
Recuerda que "en el pasado" han existido "diálogos directos o indirectos, en tiempos de violencia y de ausencia de violencia" y añade que "no es posible poner condiciones al diálogo". Urkullu sí pone condiciones, en cambio, para alcanzar acuerdos: "Ausencia de violencia, del chantaje, de la extorsión y de la presión, pero también ausencia de exclusiones", en referencia a la ilegalizada Batasuna.
Respecto a la polémica en el seno del PNV por las declaraciones cruzadas entre su presidente, Josu Jon Imaz, y el líder de su sector crítico, Joseba Egibar, en torno a la cosoberanía, Urkullu aclaró que en el partido se comparten las declaraciones de Egibar de que para llegar a la cosoberanía, el pueblo vasco tiene que ser primero soberano.
Egibar recordó ayer mismo en Radio Nacional que "la doctrina política y las ponencias" peneuviostas reconocen "la soberanía del pueblo vasco", y aseguró que "nadie, ni el propio Imaz, puede salirse de la hoja de ruta" de esas ponencias.
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