Los concejales y la gestora pactarán el voto socialista en el plan Rabassa

El Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Alicante consensuará con la dirección del PSPV, en este caso la gestora que preside el senador Antonio García Miralles, el voto definitivo de los concejales sobre el plan Rabassa. "Sobre los grandes temas, como siempre ha sido, el grupo informará a la dirección del partido de su posición y también recabará su punto de vista", aseguró el portavoz del grupo, Blas Bernal, al término de una reunión entre los concejales y el dirigente provisional del PSPV. "La gestora respetará, como es estatutario, la autonomía de gestión del grupo", añadió García Miralles, al tiempo que resaltó la importancia de la labor del grupo municipal: "Es la imagen institucional del partido", precisó. El senador hizo hincapié en la "temporalidad" de su cargo y resaltó que su función será la de allanar el camino para elegir una nueva ejecutiva, "cuyo único objetivo es desbancar de la alcaldía al PP en los comicios de 2007".

El senador Antonio García Miralles visitó ayer, por primera vez desde que fue nombrado presidente de la gestora, la sede del grupo municipal, punto de partida de la última crisis del PSPV de la capital. El voto a favor de los ediles socialistas al plan Rabassa en un pleno en el que también se acordó una subida de sueldos de los concejales acarreó la dimisión del entonces secretario general local, Juan Antonio Román.

El encuentro entre el presidente de la gestora y los concejales, según ha podido constatar este periódico, transcurrió en un "ambiente de cordialidad" y sin un verdadero debate de fondo sobre las temas principales de la ciudad. "Las dos horas de reunión se han consumido prácticamente en analizar, punto por punto, la convocatoria del orden del día del pleno extraordinario de mañana [hoy para el lector]", afirmó uno de los asistentes.

Normalidad democrática

Tras la reunión, tanto el líder del grupo como el de la dirección provisional socialista se afanaron en enmarcar en el ámbito de la "normalidad democrática" la reunión. Bernal y García Miralles subrayaron "la perfecta coordinación" entre el órgano institucional y el interno del partido e insistieron en que el objetivo común del partido es ganar las próximas elecciones.

"Hay que echar al PP del poder porque es un claro ejemplo de lo que significa anteponer el partido a los intereses de los ciudadanos", explicó García Miralles, quien destacó que la aportación del grupo municipal es "fundamental". "El grupo municipal es la imagen institucional del partido", precisó el presidente de la gestora. Bernal comulgó con el análisis del senador: "El objetivo, tras el verano, es redoblar la comunicación entre el grupo municipal y la dirección del partido con el fin de que los ciudadanos vean en este partido una alternativa seria y otras formas de entender la política y de trabajar que nos lleven en 2007 a conseguir el gobierno de la ciudad".