El PP duda sobre si blindar a sus cargos

En el consejo extraordinario de la Xunta que Fraga convocará la semana que viene se deberá tomar una decisión definitiva sobre otra de las papeletas que, desde hace tres semanas, intenta resolver el presidente en funciones. Se trata del proyecto de decreto para consolidar el rango administrativo, el destino y los ingresos de 1.200 funcionarios que ocupan cargos por libre designación del Gobierno, una iniciativa que el Consello Consultivo de la Xunta descalificó la pasada semana en términos contundentes. Fraga confesó ayer que en su Gobierno "hay diversidad de opiniones" sobre esa medida, que un grupo de funcionarios ha reclamado como retribución a "15 años de fiel servicio" al Ejecutivo del PP.

El presidente en funciones no adelantó cuál será la decisión de su Gabinete y explicó que la ha dejado para el final porque "es un tema lo suficientemente importante". La Xunta pretendía ayer cumplir uno de los trámites previos a la aprobación del decreto, la consulta con los sindicatos en la mesa oficial de negociación. El asunto ni llegó a ser debatido después de que las centrales impugnasen la presencia de los altos cargos del Gobierno que pretendían explicar el proyecto al figurar ellos mismos entre los beneficiarios.

Los sindicatos estuvieron apoyados por un centenar de funcionarios que expresaron su protesta con gritos y pancartas y se encararon en algunos momentos con los representes del Gobierno. El proyecto tiene el rechazo de las cuatro centrales, la nacionalista CIG, UGT, CC OO y CSIF.