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Columna
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¡Que ahorren ellos!

Al parecer la Comisión Europea ha publicado un documento que advierte que el "deterioro" de las cuentas externas españolas es "insostenible", uniéndose así a la legión de expertos que en los últimos tiempos se han visto irresistiblemente atraídos por la idea de "insostenibilidad". Repasen la prensa y verán el creciente número de "desequilibrios" que a juicio de nuestros analistas no se pueden mantener: el déficit corriente americano, el consumo de petróleo, la inversión y el crecimiento de China, el crecimiento de Latinoamérica, el aumento de precio de la vivienda en España, la insuficiencia del gasto en I+D+i en nuestra economía, etcétera. No importa que el tiempo pase y el desequilibrio persista. Hay que mantenerse impasible y seguir anunciando la inminencia del desastre en la confianza de que en algún momento se tendrá razón.

La tesis de que padecemos un déficit de la balanza corriente insostenible tiene su gracia. De entrada, porque siempre reconforta reconocer la muy hispana amargura del "no era esto, no era esto". Estamos donde siempre y entre los de siempre. Y luego, porque resulta interesante asistir a las contorsiones semánticas que hay que hacer para conciliar la historia y el concepto de "insostenible": en España, en los últimos 50 años hemos tenido déficit corriente en 35 ocasiones, es decir, en 2 de cada 3 ejercicios. No parece que el déficit corriente responda a la idea que uno tiene de lo que es "insostenible".

Tiene que haber desequilibrios más urgentes y acuciantes. Sobre todo, si uno recuerda que el déficit corriente es el exceso de la inversión sobre el ahorro nacional, y que cuando se invierte el 31% del PIB -créanselo, esa es según el INE la ratio del primer trimestre de 2005- para no tener déficit externo necesitaríamos registrar tasas de ahorro inverosímiles en una población próspera, envejecida, con seguridad social y disfrutando de la denostada "burbuja inmobiliaria". Pero una cosa es constatar que se invierte más que se ahorra y otra jugarse por la tesis de que España tiene un problema de insuficiencia de ahorro nacional, similar al de Estados Unidos. A diferencia de aquel país, las familias y las empresas españolas ahorran en torno al 21% del PIB y el sector público español genera un ahorro positivo equivalente al 3,1% del PIB. No son malos datos ni históricamente, ni en términos relativos.

El "problema", si es que existe alguno, es que España está invirtiendo mucho: el año pasado se invirtió, en términos absolutos, sólo un 30% menos que Alemania, una economía que es dos veces y media la española, y lo mismo que Italia y Reino Unido pese a que esas economías son una vez y media y dos veces respectivamente la economía española. ¿Tiene lo anterior mucho que ver con la "perdida de competitividad" de la economía española? Yo creo que no. Aunque hay muchos preocupados por el déficit corriente americano y por el deterioro de su posición internacional neta, hay muy pocos economistas que se obsesionen por saber cómo se distribuye ese déficit por estados. Y en la Europa del euro la situación no es muy distinta: ¿a qué mercado le podría importar que la inversión española se financie con el ahorro de un señor Frankfurt o Roma en lugar de con el ahorro de un señor de Cuenca? Lo único que los mercados deberían tratar de hacer es valorar si las inversiones van a ser rentables y si el precio que ponen a su ahorro cubre los riesgos esperados. Incluso entonces es poco probable que, aunque sospechen que no es lo más saludable invertir en construcción el 15% del PIB, no se dejen convencer por dos contundentes realidades. La primera que el déficit corriente español apenas supone el 0,3% del PIB y el 6% del ahorro europeo. Es decir, muy poco. Y la segunda que España es una economía que duplica el crecimiento de Europa. Con esos dos datos en la cabeza, y con el inquebrantable compromiso con la "estabilidad presupuestaria" que parece guiar la actuación del Gobierno, a lo mejor hay que esperar un largo periodo antes de que nuestro "desequilibrio externo" realmente sea insostenible.

(riansares@yahoo.com)

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