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OPINIÓN DEL LECTOR
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Líneas de telefónica

A principios del mes de Abril, aprovechando una de las campañas de propaganda que Telefónica lanza periódicamente, decidí contratar una línea de teléfono para mi recién estrenada casa. A los pocos días se presentó en mi casa un "técnico en líneas 1" quien nos explicó que la cosa no iba a ser tan fácil. Al parecer las líneas no iban subterráneas sino por el aire con lo cual habría que poner un poste en nuestro jardín y solicitar permiso a los vecinos para pasar el cable a través de los suyos. Una semana después volvió para confirmarnos que la única opción era ésa, pero que tenía que dar el visto bueno el "ingeniero". Pues vale... dijimos. Días después se personó el "ingeniero" en nuestra casa, confirmó el diagnóstico del "técnico en líneas 1" y nos endosó unas autorizaciones que debíamos firmar nosotros y los vecinos a través de cuyo jardín debía atravesar nuestra línea. Con las autorizaciones firmadas se personó una tercera persona ("técnico en recepción de autorizaciones") para recogerlas. Se personó en nuestra casa el "técnico en postes" y nos endosó en medio del jardín un cacharro de madera maciza de ocho metros de altura. Pasada una semana apareció el "técnico en líneas 2" para realizar la deseada acometida. Acompañé al "técnico en líneas 2", me mantuve pacientemente sujetando la escalera en cada uno de los postes de sujeción (fueron seis, si mi memoria no me falla), y tuve que cortar el tráfico tres veces. El "técnico en líneas 2" decidió que la mejor forma para llegar al interior de la vivienda era realizar tres agujeros en la fachada de mi recién estrenada casa que me dolieron como puñaladas. "Voy a habilitar la conexión y ahora les llamo para comprobar la línea", dijo, orgulloso, el "técnico en líneas 2". Menos orgulloso volvió al poco rato para decirnos que no podía darnos conexión porque los "pares" estaban saturados y esto era un problema más serio.

Y, después de tres meses, en este punto estamos: con la fachada taladrada por tres sitios, un poste de 8 metros en el jardín, un airoso cable que atraviesa tres calles y dos jardines de amables vecinos y.... ¡Sin línea! Y cansados de hablar con una máquina contestadora al intentar reclamar al 1004.

Como no tengo teléfono... aprovecho su periódico para solicitar a telefónica una bandera u otro artilugio multicolor y propagandístico para colocarlo en el poste de mi jardín.

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