Ibarretxe supedita la mesa de partidos a su garantía de éxito
La constitución de la mesa de partidos que el lehendakari, Juan José Ibarretxe, pretende para tratar sobre la normalización y para buscar un acuerdo que se someta luego a la ratificación ciudadana en una consulta, dependerá de la garantía de éxito y de obtención de resultados que los contactos previos permitan vislumbrar. Así lo aseguró ayer el propio Ibarretxe en tres entrevistas publicadas simultáneamente por El Correo, El Diario Vasco y Gara. "Si se conforma una mesa de partidos, deberá ser con unas garantías mínimas", de que se pueden obtener frutos positivos, afirmó. "No puede ser que pongamos una mesa condenada al fracaso. Sería una irresponsabilidad por mi parte y por parte de los diferentes partidos".
El lehendakari se muestra persuadido de que en septiembre comenzará las conversaciones con todas las fuerzas políticas y se declara partidario de que éstas hablen también entre sí en contactos bilaterales y multilaterales. Será una primera fase "de contacto y negociación", en busca de acuerdos sobre "la metodología, el procedimiento, el calendario y los contenidos del trabajo de una hipotética mesa", explica.
Ibarretxe no se pronuncia sobre si renunciará a constituir ese foro en el caso de que Batasuna o el PSE rechacen estar en él. "Lo que no podemos es cometer errores, discutir sobre un instrumento o intentar salvar la cara de unos o de otros, poner en marcha un instrumento que luego sólo vaya a generar frustración", afirma.
En el terreno de la gobernabiilidad, el lehendakari deja ver su confianza en que los acuerdos con EHAK en unas ocasiones, y con el PSE en otras, se la facilitarán.
Advertencias
Los dos principales partidos de la oposición, el PSE- EE y el PP, reaccionaron ayer con críticas al modo en que el lehendakari está gestionando su propuesta para ese foro de partidos.
El portavoz socialista, José Antonio Pastor, reiteró que la mesa de Ibarretxe "no podrá convocarse nunca", si persiste la violencia y pretende sentarse a ella a quien no la condene, y afirmó que el lehendakari "es preso de sus contradicciones". Anunció la constitución de una mesa sin exclusiones "para comprar los votos de EHAK en su investidura", pero "sin haber hecho las negociaciones previas con los partidos para ver si tenía o no posibilidades de ponerse en marcha". Según Pastor, son "lágrimas de cocodrilo" quejarse luego si no se puede convocar por falta de consenso. "Eso tenía que haberlo pensado antes", añadió.
Por su parte, el portavoz popular, Leopoldo Barreda, explicó que su grupo estará "en cualquier foro parlamentario", aunque no le resulte "plato de buen gusto" compartirlo con EHAK, pero no irá a una mesa externa a la Cámara, que, a su juicio, obedece a un guión dibujado por ETA-Batasuna en Anoeta.
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