"Me siento más pulpo que empanada"
Pregunta. ¿Qué le falta para cerrar el gobierno?
Respuesta. Pues nada más y nada menos que sentarme con el Bloque y acordarlo. Por lo tanto, me falta todo.
P. ¿Será la reedición de Cataluña?
R. Seguro que no. Cada país busca su camino, su huella, su forma.
P. Dicen sus compañeros de universidad que era usted guapísimo. ¿Hay liftings al revés?
R. Bueno, parece ser que he perdido algo por el camino, ¿no? Sí, de joven alguna fama había.
P. ¿Le cundía en el sector femenino?
R. Era más lo que se decía que la verdad, como casi siempre.
P. Dicen que imita a Zapatero. ¿Es usted un soso de libro?
R. Bueno, se ha especulado mucho sobre eso. Yo la verdad es que no me veo así. Me divierto lo que puedo, lo paso muy bien con los amigos y con la gente próxima. Probablemente soy tímido, y eso hace que ponga mis defensas.
P. Desmiéntame que no se le conocen gracias ni jolgorios.
R. Hombre, la verdad es que en eso soy bastante comedido, y no sé si la podré desmentir. Quizá no.
P. De uno a diez, ¿cómo se encuentra de carisma?
R. Yo no sé qué es lo del carisma. De uno a diez me consideraría una persona bastante normal. Me pondría en el cinco.
P. Es Premio Nacional de Publicaciones Agrarias. Qué puntazo, ¿no?
R. Qué cosa más extraña, ¿no? [ríe]. En mis tiempos mozos como profesor universitario me dedicaba a la investigación, y empecé a preocuparme por la cuestión campesina en Galicia, cuestión muy identitaria, muy de país. Fue mi tesis, la presenté y gané el premio.P. ¿En el PSdeG también los hay con boina?
R. Es un partido que se parece mucho a la sociedad gallega: los hay más urbanitas, y más ligados al mundo rural; con más marcha y un poquito más conservadores... Pero predomina la gente que mira hacia adelante. Me temo que hay más boina en el PP.
P. ¿Usted es más Pepe Blanco o más Paco Vázquez?
R. Ni soy un hombre muy estrictamente de organización de partido ni tengo ese punto de populismo del alcalde Vázquez. Creo que estoy bastante equidistante de los dos. Pero soy muy amigo de ambos.
P. Ande ya. Si se sabe que es puro aparato de Ferraz.
R. Lo dicen.Pero llevo haciendo política desde los 18 años, como buena parte de mi generación, que aterrizamos en la lucha contra la dictadura.
P. Para pasar un fin de semana, ¿mejor Rajoy o Fraga?
R. Yo no soy mucho de sillón, de puro y de plaza de toros. Por lo tanto, con Rajoy, con mucha dificultad. Con Fraga, no sé si lo de la pesca... Tal vez podría compartir lo de andar por el río.
P. Pues de Fraga dijo que era un tapón para Galicia. ¿Usted qué es: el cava, la chispa de la vida?
R. Espero que sí. Sobre todo es la ciudadanía, los gallegos, que tenían unas ganas inmensas de cambio, de sacar el tapón.
P. ¿Para cuándo el lema Percebes para todos en su programa electoral?
R. Ya me gustaría, ya. Hay que avanzar justamente en el terreno de repartir más y mejor. Incluso los percebes, por qué no.
P. ¿Usted es más pulpo o más empanada?
R. Yo creo que me siento un poquito más pulpo. Prefiero el contacto, la cercanía, sentir a la gente antes que estar ahí en medio, emparedado en el sandwich.
P. "Cambiaré gaitas por gallegos". ¿Son incompatibles?
R. Diría que el exceso, el aspaviento, lo desmedido, esa cosa que tanto le gustaba a Fraga... Pues la verdad, yo soy más minimalista, en la arquitectura, en casi todo. Me gustan las cosas más austeras. Por lo tanto, no me veo rodeado de miles de gaiteros. Con todo el respeto.
P. Se va a dejar de gaitas.
R. Seguro. Hay que ir para adelante y rápido. Galicia no puede perder mucho más tiempo.
P. ¿Cree en las meigas?
R. No soy muy dado, no. Aquello de haberlas, haylas lo llevo con dificultad.
P. Y si no las meigas no existen, ¿cómo podría llegar usted a presidente de la Xunta?
R. Con mucho trabajo, el empuje de la gente y bastante sentido común.
PERFIL
Con 56 años, dos hijos y un nieto, Marcos, que es su "principal debilidad", se dice amante de la bicicleta, el senderismo, el cine y la música clásica, y se reconoce galleguista y "bastante obstinado". Su aspiración es "seguir siendo Emilio Pérez Touriño". ¿Se gusta? "No me disgusto", dice en un ligero autogolpe de botafumeiro
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