El juicio del motín de Fontcalent se repetirá antes de seis meses
Vicente Magro, presidente de la Audiencia de Alicante y de sala que juzgó el motín de la cárcel de Fontcalent, anulado por el Tribunal Supremo al considerar ilegal el sistema de videoconferencia usado para tomar declaración a los 19 reos procesados, acató ayer el fallo del alto tribunal y aseguró que la repetición de la vista oral se celebrará antes de seis meses.
Magro justificó el uso de la videoconferencia en aras de la seguridad del juicio, dada la peligrosidad de los acusados, y destacó que serán "necesarios importantes medios policiales" para la repetición de la vista oral. "Está claro que en Alicante no se celebran todos los días juicios de esas características, con salas habilitadas para ello y efectivos policiales para evitar fugas en los traslados", afirmó.
El motín de Fontcalent se produjo en noviembre de 1990. Durante la revuelta carcelaria, que se prolongó durante 24 horas, los amotinados asesinaron, a navajazos, a un interno argelino. La vista oral comenzó en octubre de 2002 y dos meses después el tribunal, la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Alicante, condenó a 12 de los 19 procesados a un total de 763 años de cárcel y declaró al Estado responsable civil subsidiario, como garante de la seguridad en el recinto carcelario.
