Blasco discrepa de nuevo de otro consejero y reabre la crisis

El consejero de Territorio y Vivienda, Rafael Blasco, volvió ayer a reabrir la crisis en el seno del Consell. Primero aseguró a primeros de mayo en una entrevista que no todos los miembros del Consell estaban a la altura y ayer manifestó que no secundará la decisión del consejero de Infraestructuras, José Ramón García Antón de no colaborar con el Gobierno central mientras no se avance en el trasvase Júcar-Vinalopó. Blasco -cuyo entorno no oculta en privado la necesidad de remodelar el Consell para afrontara con garantías los dos años de mandato que restan- aseguró ayer que "lo más importante es la defensa de los intereses de la sociedad valenciana, por encima de las diferencias entre el Gobierno central y el valenciano". La actitud de Blasco se produce a las puertas del periodo estival, que utilizó Camps el año pasado para remodelar el Consell."En los aspectos que consideremos que puedan ser de interés y positivo para la sociedad valenciana, al menos yo, voy a pasar por encima de cualquier interés partidario o ideológico, porque lo que me importa realmente es defender los intereses de la sociedad valenciana y

recabar los medios e instrumentos necesarios para que esta Comunidad pueda tener mejores servicios", argumentó Blasco.

Tras esta manifestación, el consejero de Territorio indicó que el Consell funciona con "una cierta coordinación, y desde luego, con la coherencia necesaria". Razón, según el consejero, por la que mantienen un largo contencioso con el Ministerio de Medio Ambiente por la "equivocada e injustificada" decisión de derogar el trasvase del Ebro.

Blasco tiene previsto reunirse hoy con la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, en un gesto que contradice la decisión del titular de la Consejería de Infraestructuras, José Ramón García Antón, de no colaborar con este ministerio mientras no se impulse el trasvase Júcar-Vinalopó.

Para el titular de Territorio y Vivienda, "la acción del Gobierno valenciano no tiene ningún tipo de discrepancia, sino que tenemos el mismo enfoque común, como ocurrió la semana pasada cuando apoyamos el real decreto del Plan de la Vivienda del Gobierno central, tras muchas semanas de discrepancia, porque ha recogido propuestas que habíamos planteado desde el Consell para mejorar el plan.

Críticas socialistas

Desde el PSPV, el secretario de Medio Ambiente, Agua y Agricultura, Francesc Signes, afirmó que "el PP acepta la colaboración del Gobierno obligado por la penuria presupuestaria que atenaza la acción de la Generalitat". Para Signes, la ministra Narbona ha demostrado que su interés por el bienestar de la Comunidad Valenciana no disminuye a pesar de los insultos que le dedica el Consell todos los días". En este sentido, mostró su satisfacción por la firma de estos convenios y consideró que "los valencianos podremos estar más tranquilos respecto a la preservación de nuestro litoral si la ministra Narbona se compromete en su protección".

El responsable socialista manifestó, no obstante, que "en estos convenios, la inversión la pone el ministerio, mientras que la Generalitat no aporta nada". En concreto, Signes denunció que "Blasco ni siquiera se ha preocupado por elaborar el Plan de Protección del Litoral contemplado en la ley de Ordenación del Territorio". El secretario de Medio Ambiente confió en que "el convenio contribuya a introducir racionalidad en la desastrosa gestión de nuestro litoral que ha desarrollado el PP en estos 10 años".

Signes comparó las inversiones del Gobierno con la actuación de la consejería "que se ha limitado a impulsar conciertos con promotores privados para que participen voluntariamente en las tareas de reforestación".