Las cúpulas de PSC y Esquerra se reunirán para limar diferencias sobre el Estatuto

El Partit dels Socialistes y Esquerra Republicana están dispuestos a que en el trámite de comisión parlamentaria se hayan reducido las diferencias entre ambas formaciones con respecto al Estatuto catalán. El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, y el de Esquerra, Josep Lluís Carod Rovira, acordaron hace unos días, en su última reunión, un encuentro entre las cúpulas de ambas formaciones, que se reunirán en los próximos días. Junto a Carod y Maragall tomarán parte en la reunión el primer secretario del PSC, José Montilla, y su homólogo de ERC, Joan Puigcercós.

Las dos principales fuerzas que dan apoyo al tripartito catalán quieren evitar de esta manera que los puntos de vista que les separan pervivan cuando el proyecto de reforma estatutario encare, en los próximos días, su trámite de comisión parlamentaria. Junto a los máximos responsables también tomarán parte en la reunión los respectivos jefes de filas parlamentarios: Miquel Iceta (PSC) y Joan Ridao (ERC).

Los recelos entre ambas formaciones han crecido en los últimos días a propósito de la compactación de competencias que presentó el PSC y que, a juicio de Esquerra, supone una laminación del blindaje de competencias. Para los socialistas, en cambio, es fundamental que la constitucionalidad del texto, lo que, a juicio de los republicanos, no debe actuar en detrimento de la ambición política del texto.

Precisamente ayer, la adecuación del Estatuto a la Constitución, focalizó buena parte del debate del pleno del Parlamento. El presidente Pasqual Maragall mostró su plena convicción de que "la Constitución es lo suficientemente amplia para dar cabida a los cambios que proyectamos". El consejero de Relaciones Institucionales, Joan Saura, garantizó al presidente del PP, Josep Piqué, la voluntad del tripartito de que la reforma del Estatuto no desborde la Constitución.

Maragall recordó que siempre ha sostenido la tesis de que la Generalitat "tiene también iniciativa legislativa para modificar la Constitución", pero proclamó "con toda firmeza y con toda claridad" que en estos momentos no se trata de enviar a las Cortes una propuesta de reforma del Estatuto que comporte la reforma de la Constitución.

El presidente hizo estas afirmaciones en respuesta a una pregunta del líder de Esquerra Republicana, Josep Lluís Carod, quien le advirtió sobre el riesgo de que la Constitución sea utilizada como una excusa por quienes no desean la reforma del Estatuto o desean limitarla. "Nadie tiene el monopolio de la interpretación de la Constitución", dijo Carod, "y si ésta sólo ha de ser interpretada en clave centralista y uniformista, tenemos todo el derecho democrático del mundo a cambiarla si creemos que eso nos conviene".

Dudas despejadas

Maragall se congratuló de que en los últimos días se hayan despejado las dudas sobre el calendario de trabajo y pidió a la ponencia parlamentaria que redacta el proyecto de nuevo Estatut que "se atenga a los parámetros y los consejos" del Instituto de Estudios Autonómicos (IEA). También pidió un trabajo "ágil y efectivo" cuando el proyecto entre en el trámite de debate en Comisión para que el proyecto pueda ser dictaminado el 29 de julio.

En respuesta a otra pregunta sobre este mismo asunto formulada por la diputada socialista Manuela de Madre, Maragall aseguró que hará todo lo que haga falta para que el proceso de reforma estatutaria "culmine con unidad cívica y política", de forma que el éxito "será de todos y de nadie en particular". El PSC anunció ayer que De Madre encabezará la delegación socialista que defienda la reforma del Estatuto en la Comisión Constitucional del Congreso, que preside Alfonso Guerra.

Por otra parte, el Instituto de Estudios Autonómicos (IEA), que asesora al Parlamento en la redacción del nuevo Estatuto, considera inconstitucionales la mayoría de las observaciones de calado que pretende introducir Convergència i Unió (CiU) al título del borrador del texto estatutario correspondiente a las competencias de la Generalitat. Los nacionalistas, sin embargo, consideran que estas propuestas se basan en una lectura amplia de la Constitución.