Cuatro rusas en cuartos de final, un hito em el tenis ruso

En los últimos tres años la presencia de jugadoras rusas en rondas avanzadas de los torneos del Grand Slam ha comenzado a ser bastante habitual. Sin embargo, hasta ahora nunca cuatro de ellas habían logrado clasificarse para los cuartos de final en el mismo torneo. La presencia de Maria Sharapova (2ª cabeza de serie), Anastasia Myskina (9ª), Svetlana Kuznetsova (5ª) y Nadia Petrova (8ª) entre las últimas ocho de Wimbledon marca un hito histórico para el tenis de su país.

Rusia había situado a siete de sus jugadoras en los octavos de final del Open de Australia este mismo año y sólo una menos en la misma ronda en Roland Garros y en Wimbledon. Sin embargo, en ninguno de los dos Grand Slams precedentes habían conseguido que cuatro de ellas se situaran en los cuartos de final. El máximo habían sido tres: en Roland Garros en 2004 y 2005 y en el Open de EE UU en 2004. A pesar de ello, lo que elevó la imagen del tenis ruso a las cotas actuales fue la explosión de Sharapova cuando ganó en La Catedral y las finales que disputaron dos jugadoras rusas en Roland Garros (Myskina venció a Dementieva) y en el Open de EE UU (Kuznetsova superó a Dementieva).

La cuestión es que de tener a una sola jugadora capaz de disputar finales en el Grand Slam en los años setenta (Olga Morozova) han pasado a dominar el tenis femenino. ¿Ha sido por la ausencia de las grandes figuras actuales? Muchas de ellas habían estado lesionadas o en bajo estado de forma cuando las rusas entraron por primera vez en el palmarés de los torneos del Grand Slam. Es evidente que ése es uno de los motivos de su explosión. Pero, por otro lado, ahí está también su calidad. La escuela rusa funciona a toda máquina y produce nuevas jugadoras cada temporada. Algunas han completado su formación en EE UU, como Sharapova, cuya imagen la ha convertido en millonaria, o en España, como Kuznetsova o Petrova, ambas en la escuela de Emilio Sánchez y Sergio Casal. Pero la mayoría sigue en Moscú bajo el estandarte que llevan ahora mismo Myskina y Dementieva.