Unas jornadas abordan el desamparo vecinal frente al ruido
La elevada contaminación acústica que se registra en España y el desamparo de los vecinos ante esta situación fueron los asuntos que centraron ayer las primeras jornadas de Andalucía sobre este problema celebradas en Málaga.
Según el vicepresidente de la asociación de Juristas contra el Ruido, Joaquín José Herrera, los vecinos están, según Herrera, "absolutamente desatendidos, desprotegidos y desesperados" frente a la contaminación acústica en nuestro país, y criticó la escasa respuesta institucional ante los ruidos.
Herrera explicó que la legislación da toda la responsabilidad y el control en esta materia a los ayuntamientos "sin contar con ellos" y añadió que "si alguien espera que un consistorio le ayude en un expediente acústico lo tiene crudo".
Apostó, ante la falta de medios, por evitar los conflictos en el origen a través de una política preventiva de ruidos. Señaló también que las normas técnicas son "extremadamente confusas", lo que va en perjuicio de los vecinos y que tampoco se han adaptado a la realidad social.
En su opinión, "todas las medidas medioambientales han de estar consensuadas con los ciudadanos que deben participar en su elaboración" y además "se debe abordar el tema desde una perspectiva multidisciplinar e integral".
Exigió que los planificadores urbanísticos "amplíen sus miras" para tener en cuenta el problema de la contaminación acústica. Herrera recordó que España es el único país de Europa donde ha habido dos condenas del Tribunal Penal Europeo relacionadas con casos de ruidos ocasionados por el ocio.
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, señaló que su ciudad será la primera de Andalucía que cuente con un ordenamiento sobre ruidos de este tipo, que "haga compatible el derecho al ocio y el derecho al descanso".
Patricia Marín, concejala de Medio Ambiente, señaló que una ciudad como Málaga "no puede permanecer al margen de un problema público de esta dimensión" y que el ruido es un "elemento perturbador y una lacra de nuestra sociedad".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.