Un familiar con vocación popular
Calidad de conjunto, sentido práctico y precios justos. Esta receta aparentemente sencilla acompaña casi siempre a los modelos con aspiraciones de superventas. Y es la que ha aplicado Ford en el nuevo Focus. La aceptación del público europeo, y del español en particular, ha confirmado su acierto, y el reconocimiento que ahora le otorga este informe especial de El Viajero como mejor coche de 2005 coincide con la apertura del XXXIII Salón Internacional del Automóvil (recinto de Montjuïc de la Fira de Barcelona, abierto al público desde hoy hasta el próximo 15 de mayo).
La segunda generación de este familiar compacto y polivalente ofrece todo lo importante que puede necesitar una familia media para resolver su transporte. Así, presenta una línea moderna, aunque quizá demasiado parecida a la de su antecesor; un interior amplio y bien cuidado, y una mecánica moderna y eficiente con unos motores turbodiésel muy avanzados que aprovechan al máximo el combustible. Además, cuenta con una variada gama de carrocerías con soluciones prácticas que se adaptan a casi todas las necesidades. Pero, por encima de todo, el Focus es la referencia en estabilidad, se conduce con la máxima facilidad y ofrece el comportamiento dinámico más eficaz y seguro entre los coches de su tamaño, un aspecto del que ya podía presumir el modelo anterior y que ahora se ha perfeccionado. El conjunto se completa con un buen equipo de serie, suficientes opciones para personalizar la compra y unos precios asequibles y competitivos. Éstos son los argumentos que convierten al Ford Focus en uno de los coches familiares más acertados.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.