Príncipes prolíficos
Las casas reales de Dinamarca y Noruega, coincidieron ayer en anunciar la buena nueva del embarazo de las princesas Mary, esposa del príncipe heredero Federico de Dinamarca, y de Mette-Marit, esposa del príncipe heredero Haakon de Noruega, respectivamente. Por razones obvias, el hecho de que el futuro príncipe o princesa danesa sea el primogénito de la popular pareja formada por Federico y Mary, dio mayor resalto al anuncio formulado por Lis M. Fredriksen, jefa de prensa de la casa real, en el que tras anunciar el embarazo, decía que "los dos cónyuges se encuentran bien y felices" y que la princesa Mary "espera cumplir con todos los compromisos inherentes a su cargo hasta las proximidades del parto", que tendrá lugar previsiblemente en el mes de octubre de este año. El nacimiento del segundo vástago de la pareja noruega Haakon y Mette-Marit es esperado para diciembre. El anuncio de la casa real danesa fue recibido con especial alegría por la familia que sufrió, como es sabido, el año pasado, la siempre triste experiencia del divorcio del príncipe Joaquín y la princesa Alexandra. La llegada del primer vástago del príncipe heredero es un motivo de alegría que atenuará las secuelas de dicha separación. El anuncio de la casa real danesa, no especificó el sexo del nuevo vástago, un asunto que Fredriksen, dijo ser de "exclusivo conocimiento de la pareja", así como también "es el de darlo a conocer o no". Lo que está claro es que no es seguro que el príncipe o princesa por llegar, llegue a ocupar el trono del reino danés en un futuro. Ya que si Mary llegara a tener una niña y un segundo hijo varón, éste tendría prioridad sobre su hermana en la herencia del trono, según disposiciones sobre la línea de sucesión aprobadas en 1953 que sólo podrían ser modificadas por un cambio constitucional.-
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