Un palacio gótico abre sus puertas para exhibir arte contemporáneo en Valencia

Un palacio sin puertas es el nombre de la primera exposición de arte contemporáneo que se inauguró ayer en la recientemente rehabilitada casa-palacio de Joan de Valeriola, emplazada en el barrio de Velluters de Valencia. Valiosos artesonados góticos enmarcan la colección privada de la Fundación Chirivella Soriano, promotora de este singular espacio privado abierto al público. Hay obras de Sicilia, Saura, Equipo Crónica, Genovés, Sempere, Zóbel o García Sevilla, más de 60 piezas reunidas en las dos plantas superiores en lo que es la primera selección de los fondos de Manuel Chirivella y Alicia Soriano.

En la planta baja, se presentan las instalaciones de la artista nacida en Irún Marcela Navascués, que ha recreado la relación del hombre, con el universo, con la tierra y consigo mismo. El andaluz Fernando Lorite propone una intervención permanente que parece hundir los machones hasta el infinito del espléndido edificio rehabilitado por Carles Dolç y Neus Sanfèlix.

Representantes del mundo del arte, entre coleccionistas, galeristas y conservadores se dieron cita en el palacio, que albergará también exposiciones internacionales, además de talleres. También asistieron políticos como la secretaria autonómica de Cultura, Concha Gómez, la concejal de Cultura, María José Alcón, el diputado socialista Andrés Perelló o el ex líder del Bloc, Pere Mayor.