Salud quiere reforzar su actuación en los barrios más deprimidos
La consejera quiere erradicar las bolsas de malnutrición de las zonas más deprimidas
Los deteriorados edificios del Barri Antic de Manresa están habitados mayoritariamente por ancianos con escasos recursos económicos que arrastran a menudo problemas de desnutrición. En el sector Salt 70, en el municipio de Salt (Gironès), aumentan entre los adolescentes los trastornos psíquicos por su situación de exclusión social. En esas zonas, que forman parte del Plan de Rehabilitación de Barrios, la consejera de Salud, Marina Geli, quiere mejorar los indicadores de salud.
"Una de nuestras prioridades es eliminar las desigualdades territoriales que existen en materia de salud en Cataluña, y el pPlan de barrios nos ha parecido una buena oportunidad para trabajar en este propósito", explica la consejera. Esa iniciativa se inspira en una experiencia que se lleva a cabo en el Reino Unido, donde se han aprovechado planes de rehabilitación urbanística de zonas deprimidas para impulsar acciones comunitarias de mejora de la salud de sus habitantes.
Las primeras actuaciones sanitarias en Cataluña se realizarán en los 12 barrios que fueron escogidos el año pasado, en la primera convocatoria abierta por el departamento de Política Territorial, que invertirá un total de 99 millones de euros, cantidad que cubre la mitad del coste del proyecto de rehabilitación presentado por los propios ayuntamientos. El departamento que dirige Geli quiere reforzar esos planes con proyectos de carácter estrictamente sanitario, que se diseñarán y se ejecutarán en colaboración con los municipios y, muy especialmente, con las asociaciones cívicas de cada entorno, porque son las que conocen de primera mano sus carencias.
Los problemas en materia de salud de estos territorios son coincidentes en muchos aspectos porque la situación socioeconómica de sus habitantes es similar (pobreza, bajo nivel económico, marginación...). Geli destaca que estas circunstancias, y no la insuficiencia de recursos sanitarios, son las que provocan que los indicadores de salud de estos barrios sean peores que en las zonas más acomodadas. La consejera quiere también dejar muy claro que la inmigración, que suele concentrarse en estos barrios, va asociada a una salud más precaria, "pero no por el hecho de tratarse de inmigración, sino por la situación de exclusión y marginalidad".
Previamente al diseño de los proyectos, el Departamento de Salud realizará en cada barrio un diagnóstico para establecer las prioridades de actuación. En el caso del Barri Antic de Manresa, por ejemplo, el departamento que dirige Geli deberá tener en cuenta, entre otros aspectos, la situación de desnutrición que sufren muchos ancianos. Hay un grupo de personas mayores cuyas exiguas pensiones les han impedido mudarse a una vivienda más digna. El resultado es preocupante: "Muchos de ellos comen sólo una vez al día, y la mala alimentación les causa anemia y les complica otras enfermedades que padecen", explica Puri Tudela, de la Fundación Lluís Costa, una entidad que forma a asistentes sociales especializados en atención domiciliaria.
En el barrio de Salt 70, los servicios sociales han advertido, entre otros problemas, un incremento de problemas mentales entre los adolescentes, a menudo derivados de su situación de exclusión social o de la drogadicción. También han observado, por ejemplo, que muchos de los bebés nacidos con enfermedades físicas o psíquicas son de embarazos no controlados médicamente. Drogas, salud reproductiva, prevención de enfermedades sexuales y problemas de salud que afectan a ancianos y a inmigrantes son algunas de las áreas en las que se trabajará con las entidades sociales. El director general de Salud Pública, Antoni Plasencia, explica que de la experencia británica se concluye que "las mejoras en salud se logran a largo plazo, pero a corto y medio plazo ya se perciben los efectos positivos".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Declaraciones prensa
- Consejerías autonómicas
- VII Legislatura Cataluña
- Manresa
- Marina Geli
- Comunidades autónomas
- Provincia Barcelona
- Gobierno autonómico
- Generalitat Cataluña
- Parlamentos autonómicos
- Política autonómica
- Administración autonómica
- Cataluña
- Actividad legislativa
- Gente
- Parlamento
- Vivienda
- España
- Sanidad
- Salud
- Urbanismo
- Política
- Administración pública
- Sociedad