Las bolsas se desploman

Las bolsas han sufrido en esta semana fuertes caídas como consecuencia de los numerosos síntomas de debilidad de la economía, tras la reciente escalada de los precios del petróleo. La incertidumbre ha forzado el desmantelamiento de posiciones y el Ibex 35 pierde el 2,46%.

Las consecuencias de la volatilidad del mercado del petróleo en las últimas semanas se han plasmado en los recientes informes institucionales y empiezan a tener una presencia puntual en los indicadores económicos, lo que ha forzado un cambio de estrategia por parte de los inversores y la consiguiente caída de las bolsas.

El Ibex 35 baja en esta semana el 2,46% para cerrar en 9.155,20, y las ganancias anuales se reducen al 0,82%, una cifra más en consonancia con el panorama que ofrecen los indicadores económicos. El índice general de la Bolsa de Madrid cae el 2,09% y queda en 985,45.

Con estos recortes los índices bursátiles pierden los soportes que les habían venido sirviendo de referencia en las últimas semanas, en las que capearon el temporal generado en el mercado del petróleo valorando al máximo los beneficios empresariales y esperando que la repercusión del encarecimiento del crudo sobre los precios y el nivel del consumo no fuera excesiva.

En esta semana se han publicado, sin embargo, una serie de indicadores en Estados Unidos que han variado radicvalmente el panorama en las bolsas. Las ventas al por menor cayeron el 0,3% en marzo, la cifra más baja en un año, y al día siguiente el dato de las ventas empresariales del mes anterior confirmaba esta tendencia con un descenso del 0,4%. El índice provisional de confianza de los consumidores en abril caía a 88,7 desde 92,6, y el índice manufacturero de Nueva York, que sirve de orientación para los analistas, registraba la mayor caída en dos años.

Las previsiones del FMI vienen a confirmar ese enfriamiento de la economía al rebajar el crecimiento del conjunto al 4,3%, frente al 5,1% de 2004.

Los inversores no necesitaban más argumentos para replegarse y el papel ha marcado la pauta en la mayoría de las bolsas a lo largo de esta semana. Las ganancias anuales se han visto reducidas a mínimos y el panorama ha cambiado radicalmente ante las expectativas de que esas perspectivas se trasladen a corto y medio plazo a los resultados empreariales, hasta ahora el motor del mercado.

El volumen negociado esta semana en la Bolsa española ha sido superior al de la semana anterior por el incremento de la actividad institucional ante el vencimiento de los contratos de opciones y futuros. La media diaria de contratación ascendió hasta 3.616,46 millones de euros por 3.306,96 milones de la semana anterior, aunque en operaciones "abiertas" el volumen bajó hasta una media de 2.104,94 millones de euros diarios frente a los 2.298,06 de la semana anterior.