Un alumno que denunció acoso cambia de colegio en Cádiz
La Delegación de Educación en Cádiz decidió cambiar de colegio a un niño de diez años después de que la madre presentase una denuncia por el supuesto acoso escolar que sufría en el colegio concertado al que acudía, situado en el casco antiguo. El menor aseguró que varios compañeros le insultaban, le propinaban patadas, le cortaban el pelo con una tijera y le metían chinchetas por los pantalones. Estos episodios agravaron la epilepsia que padece, según la madre del menor. Sin embargo, la dirección del colegio niega los hechos denunciados y los atribuye a una invención de la madre.
El cambio de colegio se produjo hace un mes. La madre expuso su versión ayer en el periódico Viva Cádiz, en el que relató las humillaciones que sufrió su hijo en el colegio San Martín, un centro concertado religioso. Según explicó, las agresiones fueron físicas y verbales por parte de varios compañeros de clase.
Esta versión fue negada ayer por el centro. La directora, sor Antonia Blanco, aseguró que la madre actuó "por venganza" después de que su hijo fuera castigado por abofetear a otro alumno, quien días antes había participado en una agresión a unas niñas en el patio del colegio. "La madre no quiso entender el castigo a su hijo, relacionó ambos momentos violentos y anunció que daría publicidad a su denuncia para desprestigiarnos", dijo la directora.
