La dirección del Partido Andalucista disuelve la ejecutiva de Huelva y crea una gestora

La dirección nacional del Partido Andalucista (PA) decidió ayer disolver el comité ejecutivo provincial de Huelva y crear una junta gestora que presidirá Manuel López, secretario nacional de Organización. Ésta junta regirá los destinos del partido hasta la celebración del congreso provincial. La ejecutiva nacional ha depositado su confianza en Antonio Capelo, secretario nacional de Política Institucional y portavoz andalucista en el Ayuntamiento de Moguer (Huelva), para que sea la persona que reconduzca la complicada situación generada en el PA de Huelva.

La crisis estalló la pasada semana, cuando el secretario de Huelva, Miguel Romero, un político enfrentado al máximo dirigente, Julián Álvarez, interpuso una demanda contra la dirección nacional por supuestas irregularidades en la elaboración del censo de militantes. La juez ordenó la suspensión cautelar del congreso del PA que se iba a celebrar el pasado sábado.

Tras consumarse el anuncio de suspensión, Antonio Capelo ha iniciado los contactos con alcaldes, concejales y militantes andalucistas para elaborar la composición de la futura gestora, que aún no está ultimada.

Capelo, un político captado por Miguel Romero antes de las pasadas elecciones municipales, procedente del PP, apoyó a Julián Álvarez en el congreso nacional celebrado el pasado diciembre mientras sus compañeros de Huelva cerraban filas en torno a Antonio Ortega, anterior secretario nacional.

La decisión de la ejecutiva nacional se produjo en un día en el que varias agrupaciones de la Sierra de Huelva expresaron a través de un comunicado su apoyo a Miguel Romero y a su comité. Esas agrupaciones consideran innecesario que se forme una gestora. Los seguidores de Miguel Romero aseguraron contar con el respaldo de 45 de las 52 agrupaciones que el PA tiene en la provincia de Huelva. Miguel Romero aseguró ayer que no había recibido ningún comunicado sobre la disolución de su ejecutiva, por lo que prefirió no darse por enterado.

Las diferencias entre los dirigentes del PA de Huelva se desataron tras la celebración del congreso nacional del pasado diciembre. Antonio Capelo se reunió con Miguel Romero para informarle de la nueva situación del partido y que había que emprender una renovación. Pero las palabras de Antonio Capelo encontraron una dura negativa por parte del secretario provincial, quien se cerró en banda al diálogo.

En medio de la confusa situación del PA de Huelva, se presentó ayer la nueva ejecutiva local andalucista de la capital, cuyo secretario es Juan Carlos Cueto y el secretario de Organización, Juan Rodríguez Méndez, un veterano político, número dos desde hace años del PA en la provincia y considerado como la mano derecha de Miguel Romero. Juan Carlos Cueto atribuyó ayer a la falta de diálogo la crisis surgida en el PA y calificó la situación de "anormalidad".

El secretario local del PA onubense señaló que la disolución del comité provincial "no afecta administrativamente" a la ejecutiva local. "Esperamos contar con el apoyo tanto del comité provincial como de la dirección nacional, porque con el comité local sólo pretendemos trabajar por Huelva", afirmó.

Pero Antonio Capelo precisó ayer que la nueva ejecutiva local de Huelva "no va a servir para nada" y matizó que tendrá que configurarse otra, ante la nueva situación del partido.

Otra dimisión

Por otra parte, a la dimisión del alcalde de Utrera, el andalucista Francisco Jiménez, se sumó ayer la dimisión del primer secretario de la agrupación andalucista de Granada, Domingo Funes, quien deja el cargo ante la falta de acuerdo para constituir un comité provincial de consenso ante la próxima asamblea del PA en Granada, que se celebrará el próximo sábado 16 de abril.

El comité local señaló que la falta de acuerdo para formar una dirección provincial de consenso ha sido el detonante de una decisión anunciada hace unos días por este comité. Al mismo tiempo, Funes anunció que el comité local de Granada ha decidido no asistir a la asamblea provincial que se celebrará el sábado en la localidad granadina de Albolote en señal de protesta por lo que considera "un proceso viciado" y, especialmente, "porque algunos compañeros no han puesto toda la carne en el asador para llegar a un acuerdo que acabara con una crisis que nos tiene a todos completamente agotados".