"Algeciras debe ser un referente de Andalucía"
El pasado lunes, Tomás Herrera Hormigo, del PSOE, tomó posesión como nuevo alcalde de Algeciras (Cádiz). Herrera sustituyó en el cargo a su compañero de partido Juan Antonio Palacios, quien argumentó "problemas personales" para dejar por sorpresa el Ayuntamiento algecireño, gobernado por socialistas y andalucistas, tras casi dos años de mandato.
Herrera, que hasta 2002, año en el que entró a formar parte del PSOE local, no había participado en política, ve el futuro como un desafío. "Es un reto y una ilusión ser alcalde de la ciudad en la que naces, en la que vives, en la que se han criado tus hijos y has trabajado siempre", afirma. Añade que ésta "es la parte más emocionante" de su nueva tarea, porque "la más fría obliga a que el sentido de la responsabilidad te supere". "El nombramiento supera cualquier calificativo", asegura.
"Hay veces que a uno le gustaría hacer algunas cosas, pero la solución se torna imposible bajo el prisma de la legalidad", afirma
Tomás Herrera cuenta con dos años de experiencia al frente de la Delegación de Hacienda y Contratación del Ayuntamiento algecireño y reconoce que no estaba "mentalizado para ocupar este puesto". No obstante, asegura que "hay muchas cosas que hacer" y por ello entiende los dos años que aún le quedan por delante como "un compromiso con esta ciudad".
Para ello, el alcalde algecireño se ha fijado tres líneas de trabajo: "Una primera encaminada hacia las políticas sociales de cara a que todos los ciudadanos tengan las mismas oportunidades". La segunda, la seguridad, "porque los ciudadanos deben palpar que existe, ya que para sentir la libertad se deben sentir seguros". Y por último, la de los servicios públicos, que "deben mejorarse y ser más ágiles".
"Debemos abanderar la limpieza, el cuidado de los jardines y la rapidez en las gestiones que se realizan en el consistorio para poder tener una ciudad mas moderna y ágil", asegura Tomás Herrera.
Aunque el nuevo alcalde algecireño reconoce haber tenido un maestro en su antecesor en el cargo, quiere dejar claro que "no se deben hacer comparaciones sobre todo en relación a los apoyos que puedan o no llegar desde otras administraciones". "No se trata de ver a quien apoya más, la Junta de Andalucía o el partido", afirma Herrera, conocedor de que una de las causas que pudieron provocar la marcha de Juan Antonio Palacios ha podido ser la falta de apoyos externos a la hora de llevar a cabo su proyecto político.
Herrera sabe que cuenta con el máximo apoyo de su partido y del Gobierno autonómico, lo que no impedirá, según afirma, "que siga trabajando para que la implicación sea aún mayor". "Estoy convencido de que en los temas fundamentales se deben involucrar las otras administraciones", añade.
Sobre el nuevo alcalde, al igual que le ocurriese a su antecesor, existe una pesada losa heredada del gobierno que en su día formaron el PA y el PP: los problemas urbanísticos y la difícil situación económica del consistorio.
Dos asuntos a los que Herrera pretende hacer frente en los más de dos años que aún le quedan por delante hasta las próximas elecciones municipales. "En lo que respecta a la parte económica ya hay varias actuaciones en marcha que darán en breve sus frutos y en cuanto a los asuntos urbanísticos que afectan a muchas personas, hay que ver el interés de la ciudad, pero siendo escrupulosos con la legislación y con las administraciones", afirma el nuevo alcalde. Al afrontar estos dos problemas, Herrera asegura que "hay veces que a uno le gustaría hacer algunas cosas, pero la solución se torna imposible bajo el prisma de la legalidad".
A pesar de esta herencia política, el alcalde socialista destaca la lealtad del Partido Andalucista en el gobierno de coalición y afirma que "la experiencia de sus concejales es muy válida" para el PSOE, que también tiene concejales con "muchos años en política". "Hemos llegado a una unión que cualquier alcalde estaría muy satisfecho, ya que la línea de colaboración es continua, y no hay que hablar de comisión de seguimiento del pacto", afirma Herrera.
El principal reto que se marca el nuevo alcalde no es otro que "conseguir que Algeciras se convierta en una ciudad confortable, que lidere el futuro área metropolitana y que sea referente en Andalucía".
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