Expectativas en descenso

Una vez más, la escalada del precio del petróleo ha forzado a los inversores a deshacer posiciones en los mercados de valores en un movimiento que se considera completamente defensivo ante los posibles cambios que se pueden avecinar en el panorama económico.

Por el momento, la CE ha revisado a la baja sus expetativas de crecimiento del PIB de la eurozona para este año y el próximo, con el 1,6% para 2005 y el 2,1% para 2006, aunque lo que de verdad preocupa en las bolsas es la posibilidad de que el previsible encarecimiento de los precios lleve a una subida de los tipos de interés, algo poco deseable por la ventaja que la renta fija podría adquirir sobre la rentabilidad por dividendo de las acciones y, también, porque un dinero más caro podría redundar en un menor crecimiento económico.

El Ibex 35 terminó esta sesión con un recorte del 0,90%, aunque en algunos momentos llegó a perder el 1,35%, lo que limita las ganancias anuales al 1,38%, mientras que el índice general de la Bolsa de Madrid perdía el 0,78% y el beneficio anual baja hasta el 3,29%.

El resto de los mercados europeos se vio empujado en la misma dirección, sobre todo cuando el crudo brent, de referencia en Europa, llegaba a los 57,65 dólares por barril y el texas, de referencia en Estados Unidos, saltaba por encima de los 58 dólares. Un problema añadido para la eurozona es la pérdida de valor del euro frente al dólar, que encarece la factura petrolera en el peor momento de los posibles. París bajó el 0,68%, Francfort el 0,73% y Londres el 0,35%, al tiempo que la Bolsa de Nueva York bajaba el 0,41% a media sesión, aunque luego se recuperó para cerrar con un alza del 0,16%.

El volumen negociado en el Mercado Continuo es el único motivo de contento para los inversores, pues se negociaron un total de 3.309,20 millones de euros, con sólo 360 millones en operaciones institucionales. Los 2.943,62 millones de euros negociados en operaciones abiertas son un buen síntoma, aunque una buena parte de ellas se deban a la absorción de papel por parte de los cuidadores.