Desde el globo al cohete

La carpa de La Caixa ha vuelto a la plaza de los Fueros de Vitoria en lo que ya es una cita imprescindible con las producciones expositivas de esta entidad financiera. Hasta el próximo 1 de mayo se podrá disfrutar de Objetivo ¡Volar!, un recorrido por la historia de la obsesión del hombre por superar la ley de la gravedad y sus distintas victorias, desde el globo al cohete. Como en otras exposiciones de La Caixa, el contenido de la muestra se aborda desde un punto de vista didáctico, el mejor antídoto contra la indiferencia o el aburrimiento.

En el fondo, se trata de explicar los pasos en la conquista de un sueño. La exposición explica cómo todos los ingenios que ha pergeñado el hombre para conseguir levantarse del suelo durante el tiempo superior a un salto surgen de la observación de otros seres vivos que sí lo lograban. Recoge los principios y leyes físicas que permiten el vuelo, así como los mecanismos que utilizan las plantas, los animales y el hombre para vencer la gravedad. En resumen, cohetes, globos, aviones y paracaídas vuelan aplicando los mismos principios que semillas, bacterias, insectos y aves.

La exposición juega en todo momento con esta idea. En el perímetro de la carpa se recogen las distintas etapas por las que ha pasado la Humanidad en la conquista del espacio aéreo, desde Ícaro hasta el último transbordador espacial. Cada hito se refiere con sencillez, al mismo tiempo que se relaciona con las referencias naturales en la solución correspondiente. Por ejemplo, el globo se vincula con un experimento sobre el principio de Arquímedes, y el ala de avión con las investigaciones sobre las distintas maneras de volar de las aves, desde las planeadoras a las migratorias.

Todo ello, con una calidad en los materiales expositivos impresionante, que siempre deja lugar al asombro del profano. Como ocurre cuando el visitante descubre cómo la hélice ya estaba inventada: los espermatozoides se desplazan gracias al movimiento helicoidal de su flagelo, como bien refleja una animación informática tridimensional, una de las referencias de la exposición. Vivir para ver, o ver para volar.