Detenidas tres personas por planear un suicidio colectivo en Zamora

El Juzgado de Instrucción número 5 de Zamora ordenó ayer la libertad provisional, con orden de reclusión en un centro psiquiátrico, de tres personas con edades comprendidas entre los 26 y los 29 años, que presuntamente contactaron por Internet para organizar un suicidio colectivo. Los detenidos, dos de ellos naturales de Madrid y otro de Gijón (Asturias), pretendían quitarse la vida en un alojamiento rural de Lober de Aliste (Zamora).

Los tres presuntos suicidas fueron detenidos el pasado miércoles por agentes del Cuerpo Nacional de Policía a raíz de la denuncia de dos periodistas que coincidieron con ellos en un foro de Internet, donde presuntamente compartían los planes para acabar con sus vidas en los próximos días utilizando monóxido de carbono. La investigación policial se llevó a cabo en coordinación con agentes de la Policía Judicial de Madrid. Las tres personas arrestadas, que no pasaron hasta ayer a disposición judicial, están acusadas de un presunto delito de inducción al suicidio, según informaron fuentes judiciales.

La investigación determinó que no existían razones personales ni laborales para que los jóvenes se quitasen la vida. Tampoco se ha encontrado conexión con ninguna secta satánica, pese a que la policía no descarta que el pacto suicida pueda tener una "connotación demoniaca" y tenga que ver con "ritos y prácticas con el diablo", según precisó el subdelegado del Gobierno en Zamora, Carlos Hernández.

La detención se produjo poco después de que los jóvenes llegaran a la casa rural que habían alquilado en Lober, una pequeña localidad de 63 habitantes situada en la comarca de Aliste, junto a la Sierra de la Culebra, al noroeste de la provincia.

Tras el arresto, los agentes efectuaron una inspección en el alojamiento, donde hallaron carbón para quemar, una paellera y un medidor de monóxido de carbono que, según indicaron fuentes judiciales, se iban a emplear presuntamente para el suicidio.

Las tres personas prestaron declaración ayer durante más de tres horas en el Juzgado de Instrucción número 5 de Zamora y posteriormente fueron trasladados al servicio de Psiquiatría del Hospital Provincial de la ciudad.

El lugar elegido para llevar a cabo el suicidio colectivo, según el subdelegado del Gobierno en Zamora, no tenía relación con ninguno de los detenidos y fue elegido "por sus especiales características, que hacían que pudieran pasar desapercibidos", explicó Hernández.