'Galácticos' por un día

Antes de la visita del Real Madrid, Quique Flores, al mando del novato Getafe y con el único pedigrí de haber dirigido unos cuantos partidos de los juveniles de los galácticos, miraba de reojo los puestos de descenso con cinco puntos a favor. Lo suyo era una hombrada, ampliada a ocho puntos anoche con su triunfo sobre Guti y compañía. "Hay que tener humildad y cabeza para llegar a la salvación cuanto antes", manifestó aun así el entrenador del Getafe, respetuoso como siempre del protocolo.

El cuadro de Quique Flores, ex lateral de Madrid y Valencia, no sólo guardó las formas en la sala de prensa; como advirtió días antes, sus hombres no salieron "como un objeto pasivo" ante el cuadro de lujo de Vanderlei Luxemburgo. Lo hicieron sin contravenir sus preferencias por el mimo a la pelota y el buen fútbol. "La victoria nos da la fortaleza suficiente para encarar con garantías el último tramo de la temporada", insistió.

Quique Flores reconoció que "le había venido bien" la prórroga del Madrid en Turín, que anoche confirmó "sus muchos problemas" en Getafe. Pero matizó: "Aunque tocado, el Real Madrid sigue siendo un gran equipo y sacarles del campo como hemos logrado es muy complicado; hemos anulado a Figo o Zidane y estoy muy orgulloso". Su estrategia de reducir espacios y las múltiples ayudas por todo el campo habían dado resultado.

Más dicharacheros se mostraron los héroes locales. "Es una gran noche para mí", dijo Albiol, siempre rápido con las palabras, que dedicó su gol "a quienes han confiado en mí desde un principio". Campeón de Europa sub 19, Raúl Albiol reapareció el mes de enero en partido de Copa en Pamplona (2-0), cinco meses y diez días después del accidente en Cuenca que casi le siega la vida. Frío en el ejecución, el pivote reconvertido en central aprovechó un despeje horrible de Helguera. "Sabíamos que venían un poco tocados, estaban cansados, que si metíamos ritmo al partido podíamos ganarlo", desveló el larguirucho canterano de Paterna.

Riki, en su día capitán del Real Madrid B, también saldó cuentas con el equipo que le descartó después de cuatro años llamando a las puertas de la primera plantilla. Lo mismo que Aragoneses, un portero muy cuestionado durante toda la semana por los dos goles que regaló una jornada antes frente al Betis.

"Ha sido un partido que ha dado homenajes dentro del mismo. Lo mejor que le puede pasar a un entrenador es ganar el partido y a jugadores", concluyó emocionado Quique Flores. "El fútbol es así de caprichoso, da esas revanchas como las que han tenido Aragoneses, Albiol y Riki; me alegro por todos". La fiesta se podría cerrar el miércoles en Bilbao, en partido aplazado; el Getafe es el único club que no ha vencido lejos de su estadio.