Una mujer en 126 años
Una candidata se presenta a las elecciones a la presidencia del Ateneo de Valencia por primera vez en su historia
126 años tiene el Ateneo Mercantil de Valencia. Y en todo ese tiempo nunca antes se ha presentado una mujer a la presidencia de esta institución de carácter apolítico. Ni siquiera durante la etapa republicana ni en el transcurso de la Guerra Civil, cuando recibió el nombre de Ateneo Popular Valenciano. Hoy, una mujer, Lola Ausina, presidenta del Seminario de Mujeres Grandes, lidera una candidatura formada por otras siete mujeres y cuatro hombres que aspira a presidir esta tradicional entidad ubicada en un edificio emblemático de la Plaza del Ayuntamiento. La otra opción está representada por el actual presidente, el cirujano y ex diputado del PP José Manuel Botella, que lleva ocho años en el cargo.
Las elecciones arrancan hoy y concluyen el miércoles en un ambiente enrarecido y tenso por las descalificaciones que el propio Botella y algunos socios próximos a él han dirigido hacia la candidatura alternativa, que ha sido tachada de catalanista, comunista y que ha sido despachada con comentarios de esta guisa: "un grupo de amiguetes". Botella ha llegado a afirmar que evitará el desembarco de Acció Cultural del País Valencià. Ausina rechaza de plano estas calificaciones y también, como se ha dicho, que detrás de su opción se encuentre el PSPV, independientemente de la adscripción política de cada persona.
Entre los avalistas presentados por esta candidatura se hallan dos ex presidentes del Ateneo como José Antonio Perelló Morales y Joaquín Maldonado. También ha mostrado su apoyo la ex ministra socialista Carmen Alborch. La simple mención de su nombre provocó abucheos entre algunos asistentes a la asamblea general celebrada el pasado viernes.
El grupo de Ausina cuenta con socios del Ateneo desde hace 30 años, como el catedrático de Economía Aplicada Vicent Soler, o el economista Alejandro Máñez, comenta la aspirante a la presidencia, que lleva tres años como socia, al igual que el resto de mujeres de la alternativa.
Ausina recuerda que su intervención en la asamblea reconoció los logros alcanzados por Botella durante su mandato. Ayer, volvía a reiterar que en los últimos ocho años se ha salvado casi de la bancarrota a la institución y se ha recuperado un espacio físico que se encontraba en unas condiciones muy deterioradas. Un espacio que tiene una enorme potencialidad. Cuenta con 7.000 metros cuadrados disponibles para realizar todo tipo de actividades en pleno corazón de Valencia; con una importante biblioteca que contiene valiosos incunables, además de una apreciada hemeroteca; y con un teatro recién restaurado.
A jucio de muchos, esta potencialidad, sin embargo, no se corresponde con el papel que desempeña el Ateneo en la vida cultural y social de Valencia, a pesar de que se organizan actividades y no sólo se juega a las cartas.
Ausina y lo socios que la apoyan consideran que se puede dinamizar el Ateneo y convertirlo en un fórum de debate y de opinión, en un centro vivo más abierto a la sociedad. Alrededor de 2.700 socios con derecho a voto, sobre un total de poco más de 3.000, decidirán esta semana el futuro de la institución.
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