La energía mestiza de Sasha se vuelca en la música tradicional mexicana
La cantante presenta hoy en Madrid temas de su álbum intimista 'Por un amor'
Empezó en el grupo infantil mexicano Timbiriche (del que también formaron parte Paulina Rubio y Thalía), ha sido cantante de pop, actriz de telenovelas y ocupado portadas de revistas junto a Alejandro Sanz o Miguel Bosé. Tras una ausencia de siete años desde su disco anterior, Sasha inicia a los 34 una nueva vida con Por un amor, grabación de música tradicional mexicana, de figuras como Cuco Sánchez o Chavela Vargas.
"Yo empecé a cantar muy chica y sentí que ya no tenía nada que decir a través del pop. Y creo que cuando no tienes nada que decir está muy bien quedarte callado", afirma Sasha. Siete años después de 11:11, "un disco de pop bastante alternativo con dos canciones con un músico que utiliza instrumentos prehispánicos, un tema hablado y uno en sánscrito, un tema con Julieta Venegas y otro con Nacho Mañó", llega Por un amor, grabado en Madrid y que presenta esta noche en esta ciudad, en la sala Galileo Galilei.
Sasha Sokol (Ciudad de México, 1970) se considera mestiza, afirma, "no sólo porque mis padres llegan de distintas latitudes, sino porque he crecido escuchando música tradicional mexicana, pero igualmente jazz, bossa, música cubana, flamenco o música anglo. Por eso no quería grabar en México, donde el músico tiene como lengua materna la ranchera".
La larga lista de agradecimientos del disco está encabezada por Chavela Vargas. "Por respeto y admiración", explica. "Creo que sucede con ella lo que nos sucede cuando vemos a Juliette Gréco. Es esa escuela que dice cada palabra, que se planta en un escenario sin el oropel de las luces, los bailarines, las tetas... Es arte. Y desnudez, y presencia. Yo la conocí hace años en México y siempre el acercamiento fue muy generoso de su parte. El día que tomé el vuelo para venir a Madrid a grabar el disco veníamos en el mismo avión. Y se lo comenté. El caso es que estuvo conmigo en varios ensayos".
Al poco tiempo de haberlo grabado, Sasha firmó por la discográfica V2. "Yo vivía en esa época en Nueva York. Estuve cinco años allí estudiando teatro y, de pronto, escuché música mexicana. Creo que hay una edad en la que algo de la música tradicional de tu país te toca una fibra sensible; luego tienes edad para haber amado y sufrido y puedes expresar esos sentimientos como los expresan las rancheras. Y la distancia te hace ver las cosas de tu país de otra manera. Se juntaron esos tres factores y regreso con un disco muy distinto", asegura.
"Me mudé a Madrid y estoy bien contenta. Me ofrece cosas muy buenas mucho más allá del trabajo. Adoro la luz porque la luz marca muchísimo el estado de ánimo de la gente. Y me gusta mucho que siendo una ciudad tremendamente cosmopolita siga siendo un pueblito", dice riendo. Casi desconocida en España, Sasha es un personaje popular en México: consiguió muchos discos de oro, actuó en telenovelas, presentó un programa cultural de televisión, se la relacionó sentimentalmente con Luis Miguel... "Lo que me mueve de cambiar es la posibilidad de reinventarte".
"A mí me gusta la música mexicana íntima. Con el mariachi no puedes hacer pausas y frasear distinto, ya que siendo un grupo tan grande no hay manera de que todos te sigan", cuenta. "El mejor disco es el que de verdad tienes ganas de cantar".
En los créditos figura también el nombre de Miguel Bosé. "Fue padrino de Timbiriche. Tienes nueve o diez años y Miguel Bosé es, inevitablemente, tu primer sueño húmedo, tu primera fantasía, todo. Yo estuve perdidamente enamorada de Miguel, a nivel platónico, muchos años. Más allá de eso, me parece que es un tipo que busca, no se detiene, se atreve".
Estos días se la ha podido ver asistiendo a conciertos de Savina Yannatou, Virgínia Rodrigues o Juliette Gréco. "Voy por aprender, por saber qué está pasando. Y porque no hay nada que más me mueva que la música. Muchas veces voy a conciertos de gente que no tengo la menor idea de quién es. Y a veces no atino, pero de pronto encuentras cosas de las que no te hubieras enterado".
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.